El próximo 13 de marzo estamos llamados a votar por congresistas, también a votar, si así lo quiere el elector -no es obligatorio- por consultas interpartidistas para seleccionar candidatos presidenciales a primera vuelta.
La democracia de Colombia tiene en la elección de congresistas uno de sus mayores pilares. El Congreso soporta la democracia representativa y sus actuaciones garantizan el equilibrio del poder público en un régimen que es fuertemente presidencialista. Elegir un buen congreso es fundamental para alcanzar los fines del Estado.
Desafortunadamente, la atención mediática que los grandes medios de comunicación le ha dado a las consultas interpartidistas y de coaliciones presidenciales está llevando a que la campaña electoral del nuevo congreso de la república haya quedado en un segundo plano.
Muy pocos son los medios de comunicación que están cubriendo esta elección como debería hacerse. Las encuestas se enfocan en los candidatos a las consultas como si nuestro régimen fuera parlamentario y al final lo que están haciendo es fortalecer aún más el régimen presidencialista.
La elección convocada para elegir senadores y representantes ha sido cooptada mediáticamente por la elección de las consultas. Se está cometiendo un error histórico que le pasará factura a la democracia colombiana. Al final tendremos un Congreso más débil y muy alejado de las bases sociales del país.
Los mismos medios de comunicación que hoy no le prestan atención a la elección de congresistas serán los primeros en salir a quejarse por la debilidad de este.
El debate natural que se debería estar dando en cabeza de los congresistas en temas tan importante como la próxima reforma tributaria o el futuro de la regla fiscal, el estatuto anticorrupción, los efectos de la ley de seguridad ciudadana, los problemas de inflación, desempleo y crecimiento económico fue sepultado por la infinidad de entrevistas y debates de los precandidatos presidenciales.
Se elegirán congresistas sin ningún compromiso y lo peor es que muchos votarán sin saber qué piensan los candidatos. El cubrimiento a las posturas de los Partidos es muy poca porque el enfoque está en las consultas, los medios le han dado un giro al enfoque a las elecciones de marzo 13, han debilitado la elección de congreso fortaleciendo a aquellos que hoy poseen maquinarias, clientela y mermelada.
La información que tienen los electores la ofrecen los candidatos mediante las reuniones que ellos organizan, en publirreportajes o por medio de las redes sociales. La función social que tienen los medios de comunicación de presentar los candidatos ante la opinión y de hacerles un riguroso seguimiento no existe.
La desventaja que tienen los candidatos que no cuentan con maquinarias y clientela gubernamental es inmensa frente a quienes sí.
Debido a esto, son muy pocos los candidatos que están buscando votos de opinión, situación que terminará fortaleciendo la captación del estado por parte de las megaempresas electorales y profundizando la crisis de representación que vive el país.
De otro lado, las denuncias sobre fenómenos de corrupción electoral y del mal uso de los recursos del estado para favorecer campañas políticas no están recibiendo la atención necesaria.
Los medios nacionales de comunicación andan tan ocupados con las consultas que dejaron de lado lo que pasa con la elección del órgano que aprueba las leyes y hace el control político.