Intentando disminuir la incertidumbre causada por la pandemia ya se empieza a conocer algunas proyecciones macoreconómicas para Colombia: Crecimiento del PIB entre 3.5 y 5.0 %, Inflación entre 2.0 y 3.0 %, y Tasa de ínteres de 1,75 %.
Con relación al PIB, El Grupo Bancolombia pronostica un crecimiento para 2021 de 5,5%, Davivienda proyecta 5,3%, el Banco de la República 5,5%.
Desde la perspectiva del Grupo Bancolombia, las variaciones negativas van a mantenerse hasta el primer trimestre de 2021, y aclaran que el despegue definitivo de la economía colombiana dependerá de la implementación de una solución definitiva a la pandemia, bien sea a través de una vacuna o una solución terapéutica de alta efectividad.
Para Davivienda, la economía crecería gracias al dinamismo de los sectores como: comercio, reparación de vehículos, transporte, almacenamiento, alojamiento y servicios de comida, así como el sector de la producción manufacturera, mientras que las actividades financieras y de seguros, las relacionadas con la administración pública y actividades inmobiliarias serían las de menor dinamismo en 2021. También plantea que el comportamiento del consumo de los hogares, el cual conforma más de dos terceras partes del producto, tendría una variación de 6,9% en 2021.
El Banco de la República pronostica que el crecimiento de 2021 dependerá de la magnitud del choque en 2020 y estaría entre 3% y 7%”, y proyecta que la economía solo alcanzaría los niveles de producción anual de 2019 al final de 2022.
En cuanto a la inflación, para el Grupo Bancolombia, el año 2020 podría cerrar con un nivel entre 1,3 y 1,5%, debido principalmente a la brecha de producto y a las bajas presiones en el grupo de alimentos.
Para el 2021, el Banco de la República proyecta que la inflación se situaría entre 2% y 3% debido a la recuperación económica producto del alza de las medidas regulatorias temporales. Bancolombia proyecta 2,46% y Davivienda 3,17%.
El Grupo Bancolombia, sostiene que a partir del segundo trimestre la economía empezará a ganar tracción y las medidas de alivio en algunos rubros de la canasta familiar se reversaran, la inflación empezará un proceso de aceleración controlada, y para diciembre la inflación en 2,5%.
Mientras tanto, Davivienda explica que la inflación no tuvo el comportamiento esperado por lo menos al inicio del año, debido a que cuando existe un crecimiento en la actividad económica, tiende a generarse aceleración en el crecimiento de los precios y viceversa. Muchos aumentos de los precios de los insumos no han podido ser trasladados al consumidor por falta de demanda.
Se prevé que para 2021, a medida que la economía se recupera, también lo hará el nivel de precios.
Las tasas de interés y la política monetaria componen otras de las dimensiones macroeconómicas importantes. En el presente año el Banco de la República consideró como la opción más segura una reducción gradual de la tasa de interés, pasando de un ritmo de 50 puntos básicos a 25 puntos básicos, hasta llegar a la tasa actual que corresponde a 1,75%, la tasa de interés más baja históricamente.
Davivienda afirma que el margen de reducción ya se agotó y que por lo tanto, la tasa de interés debería mantenerse constante en lo que resta de 2020 y durante todo el 2021.
Por su parte, el Banco de la República cree que la postura correcta frente a los impactos de la pandemia es emplear una política expansiva, que dependerá principalmente de la magnitud y persistencia de los choques sobre la demanda agregada, el comportamiento de la inflación y sus expectativas, la evolución de las condiciones financieras internas y externas, y por último el desarrollo de la pandemia y las medidas que tomen el gobierno y los agentes económicos.