Diputado pide que el ‘barretismo’ responda por hospitales de Rioblanco y Chaparral

El Diputado liberal, Carlos Reyes, culpó al exgobernador Ricardo Orozco, así como al senador y también exgobernador, Óscar Barreto, de ser los responsables en las obras de los hospitales de Rioblanco y Chaparral, las cuales no han arrancado pese a que sus contratos se firmaron hace más de un año.

“Es vergonzoso que un gobierno, que se preciaba de ser ejecutor, le haya fallado a los habitantes de estas dos poblaciones tan sufridas y que por años han anhelado tener hospitales modernos”, afirmó el diputado.

Señaló que, en Rioblanco, por ejemplo, el contrato del hospital María Inmaculada tuvo un costo de $10.350 millones “y la obra no arranca, el sitio donde se pretendía construir se volvió criadero de zancudos”.

Reyes aseguró que lo mismo sucede con el hospital San Juan Bautista de Chaparral, “donde solo hay un lote abandonado con una valla que dice que el contrato tuvo un costo de $90.000.000, el cual fue firmado por la anterior administración departamental”.

Considera que Rioblanco, en vez de contar con buena salud, “lo que sí viven sus habitantes es una verdadera emergencia pues la atención médica la reciben los pacientes en una casa antigua y en lo que quedó en pie del hospital que fue derribado para dar paso a la nueva construcción".
  
Añadió que “ya se van a cumplir dos años de haber sido colocada la primera piedra en Rioblanco, y esta es la hora que allí no hay nada, lo único que se ve es un lote con zanjas abiertas por el contratista, el mismo que se ganó la licitación de Chaparral y el puente de la calle 60 de Ibagué”, dijo Reyes.

A su regreso de visitar Rioblanco y Chaparral, el diputado aseguró que “los dos proyectos de salud entraron a engrosar la lista de elefantes blancos del barretismo”.