Así desviaron $1.600 millones del puente de la 60 a familiares de Olaguer Agudelo

La construcción del fallido puente elevado de la calle 60 con carrera Quinta fue una gran obra de teatro que se habría montado para apropiarse de los recursos del anticipo económico asignado por la Alcaldía de Ibagué, que ascendía a los $11.000.000.000. Ver: (Incertidumbre en el sector de la calle 60 por obras abandonadas)

Pruebas documentales, testimoniales y hasta los informes de la interventoría obtenidas por EL OLFATO revelan que nunca hubo un plan de ejecución del proyecto, ni se contrató el personal exigido en la licitación y tampoco hubo la inyección económica de los dos socios del contrato: Roberto Gutiérrez y Olaguer Agudelo Prieto, quienes tienen el 90 % y el 10 %, respectivamente, del Consocio Puente Carrera Quinta.

Ambos recibieron el contrato, en abril de 2023, y no tenían ni el dinero para pagar las estampillas que exige la Alcaldía de Ibagué, como lo admitió la exsecretaria de Infraestructura Municipal Sharon Guzmán, en una entrevista concedida a este medio el 28 de mayo.

El proyecto tenía un costo total de $39.000 millones y solo las estampillas costaron $1.600 millones, dijo en su momento la ingeniera Guzmán, quien fue despedida del cargo seis meses después, tras admitir públicamente que esta firma contratista estaba desfinanciada. Ver: (Orozco – Olaguer – Hurtado: el ‘triángulo de las Bermudas’ del Tolima)

“Ellos recibieron ese contrato y se echaron la bendición. Ninguno de los dos quería poner plata para legalizar y, parece, que les fiaron hasta las pólizas. Con decirle que hasta la señalización y separadores plásticos naranja que se pusieron en la Quinta eran prestados de otra obra. Y como si fuera poco, en la licitación presentaron las hojas de vida de 26 profesionales, que hacían parte del personal mínimo exigido para la ejecución del contrato, y ni al principio ni al final del proyecto lo tuvieron vinculado”, reveló una fuente de la Secretaría de Infraestructura de Ibagué, quien pidió no ser identificada.

La plata para los bolsillos de la familia Olaguer Agudelo

Lo único que sí tenían listo era un plan para sustraer buena parte del anticipo económico aprobado por la Secretaría de Infraestructura de Ibagué. Cerca del 55 % de los recursos que se desembolsaron terminaron en las cuentas de Bancolombia y del Banco de Bogotá de la señora Betsy Agudelo y Sergio Agudelo, esposa e hijo mayor del contratista Olaguer Agudelo Prieto.

El Consorcio Puente Carrera Quinta montó un plan de inversión del anticipo, que se hace a través de contratos con supuestos subcontratistas, y que, posteriormente fueron presentados al interventor del contrato y la Fiduciaria del Banco de Bogotá, entidad designada por la Alcaldía de Ibagué para administrar los $11.000 millones asignados para el inicio del proyecto.

El señor Agudelo subcontrató a las empresa Apia Constructores S.A.S. y Silso LTDA, para adelantar obras de la red pluvial en la zona de la calle 60 con carrera Quinta y el manejo del talento humano del proyecto, respectivamente.

Estas compañías, según los certificados de la Cámara de Comercio de Bogotá e Ibagué, fueron constituidas en el año 2019 y pertenecen a Sergio Agudelo y a Betsy Agudelo.

Ellos dos recibieron $1.628.832.805 en el segundo semestre del año 2023.

De acuerdo con los soportes obtenidos por EL OLFATO, la empresa Apia Constructores S.A.S., perteneciente a Sergio Agudelo, recibió dos giros: uno en agosto, por $1.077.025.228, y el último, en noviembre, por $301.807.577.

Y la esposa de Olaguer, encargada de todos los procesos de vinculación de personal y liquidación de planillas de seguridad social, consiguió un desembolso de $250.000.000.

“Es muy llamativo que Olaguer haya contratado la empresa de su esposa para encargarse de un talento humano que nunca tuvo completo, al que siempre le debía los salarios, la seguridad social y puso a trabajar sin las garantías mínimas de protección”, sostuvo uno de los extrabajadores del consorcio, quien también accedió a hablar con este medio bajo la condición el anonimato.

Esa versión del exempleado la confirma el informe de la interventoría Consorcio Conexión Vial 60, encargada de la vigilancia de la ejecución del proyecto. Según el documento oficial, presentado el 30 de noviembre de 2023, el Consorcio Puente Carrera Quinta nunca estuvo al día con los aportes al sistema de seguridad social en salud.

“Se ha requerido al contratista el pago oportuno de las planillas de pago de seguridad social, mes a mes, pese a las solicitudes por parte de la interventoría, las mismas se siguen presentando con periodos en mora. Si bien es cierto que la norma dice que las EPS y ARL no pueden negar la atención del empleado por estar en mora, la realidad es que al no estar al día en pagos de la planilla sí causa traumatismos al empleado al momento de solicitar una cita o pago de una incapacidad o atención por accidente laboral, pues las entidades están solicitando soporte de pago de las planillas para la atención”, advirtió la interventoría.

Y también existirían falencias en la ejecución de las tareas encomendadas a la empresa Apia Constructores. La interventoría, en el mismo informe del 30 de noviembre, subrayó que el Consorcio Carrera Quinta ha desatendido los requerimientos de la Fiduciaria Bogotá en cuanto al manejo del anticipo económico.

“Es de suma importancia que se aclare lo referente al manejo de anticipo en Fiducia Bogotá. Se recomienda que contractualmente se acuerde cómo va a ser la ejecución del contrato ya que en el plazo restante es imposible su ejecución. La interventoría ha solicitado adelantar proceso sancionatorio por incumplimientos reiterados a las obligaciones por parte del contratista Consorcio Puente Carrera Quinta”, indicaron Francisco José Restrepo y Edwin Alexander Fernández, integrantes de la firma interventora. 

Distanciamiento entre los socios del consorcio

En mayo de 2023, EL OLFATO divulgó un artículo en el que sostenía que el contrato del fallido puente elevado de la carrera Quinta guardaba similitudes con las licitaciones que montó el abogado Orlando Arciniegas Lagos para los Juegos Deportivos Nacionales del año 2015.

Y, siete meses después, el tiempo parece confirmar esa teoría. Aquí, como pasó en la administración del exalcalde Luis H. Rodríguez, se agruparon dos constructores para presentarse a la licitación y ganarse el contrato.

Roberto Gutiérrez, tiene el 90 % de participación, y Olaguer Agudelo Prieto, el 10 %. Eso por lo menos está consignado de esa manera en el papel. 

Olaguer Agudelo Prieto, es un contratista local sin experiencia en puentes elevados, que atraviesa serios problemas económicos y cuestionado por dejar obras abandonadas en el Tolima, Cundinamarca y Huila. Ver: (Los antecedentes de incumplimientos del contratista del puente de la calle 60)

Él, según las fuentes del sector de la ingeniera local, “era el dueño del negocio” y buscó a un contratista serio, con experiencia y músculo financiero grande para ganarse la licitación y así lo lograron”.

El escogido fue Roberto Gutiérrez, un constructor costeño, que tiene sus empresas en Bogotá y goza de buena reputación. A ellos los habría presentado Alexander Pinzón, quien fue director del proyecto del puente de la 60 y trabajó con ambos en el pasado.

“No se sabe cuál fue el arreglo que hicieron Roberto y Olaguer. Ellos no se conocían ni nunca habían trabajado. Lo que sé es que Olaguer es un tipo carismático, charlatán y enredador. ¿Quién sabe qué le prometió y lo metió en esto? Lo cierto es que ninguno quería soltar el dinero y terminaron agarrados. Olaguer, después de asegurar parte del anticipo, le entregó la representación legal del contrato a Roberto”, dijo otro extrabajador del Consorcio Puente Carrera Quinta.  

Un exalcalde del Tolima, que dice conocer muy bien a Olaguer Agudelo, aseguró que él nunca interviene en los procesos de contratación del estado para ejecutar los proyectos sino que intervendría como intermediario entre el verdadero ejecutor o su socio en los consorcios y el político que los contrata. Ver: (Olaguer Agudelo Prieto sigue recibiendo dinero sin realizar obras en Ibagué)

“Él no ejecuta, él vende los contratos. Su estrategia es asegurar que el alcalde o el gobernador le adjudiquen los negocios, busca quién lo haga y su papel es ser el garante entre el contratista y el contratante”, explicó el veterano exmandatario consultado por EL OLFATO.

En muchos de los contratos obtenidos en el cierre de los mandatos del exgobernador Ricardo Orozco y el exalcalde Andrés Hurtado, coincidencialmente, Agudelo Prieto casi siempre iba como socio minoritario. Ver: (El millonario 'favorcito' del exgobernador Orozco al contratista incumplido Olaguer Agudelo Prieto)

Esta redacción se comunicó con los señores Roberto Gutiérrez y Olaguer Agudelo, para obtener sus versiones sobre estos hechos, pero ninguno aceptó las entrevistas.

Las irregularidades técnicas

La exsecretaria de Infraestructura, Sharon Guzmán, y el exdirector Técnico de esa dependencia, Diego Herrán, tendrán mucho que explicarle a los órganos de control.

Ambos fueron complacientes y se abstuvieron de sancionar al contratista en puntos clave como el incumplimiento del personal mínimo exigido en la licitación, que era de 26 profesionales y que, en el punto de mayor contratación, llegó a 13.

¿Y por qué no los sancionaban? “Ellos (Guzmán y Herrán) sabían que la licitación se hizo mal y no contaban ni siquiera con diseños funcionales para construir el puente. Prueba de eso es que, el 30 de noviembre, la interventoría admitió que no habían terminado de ajustar los diseños que entregó la Secretaría de Infraestructura”, dijo un exempleado de la firma interventora.

Ese informe del 30 de noviembre también reveló que no se habían recibido: los diseños ajustados del puente ni el diseño de pavimentos, tránsito y señalización definitiva.

“Se considera como crítico la revisión, actualización u optimización a diseños para ejecución de la FASE I. En los diferentes comités siempre se ha tratado este tema y la necesidad de agilizar la entrega de productos derivados de las revisiones. La segunda necesidad crítica surge de la necesidad (SIC) de construir la red eléctrica provisional que interfiere con algunas actividades en la carrera Quinta. No se ha avanzado en los diseños eléctricos red definitiva de alumbrado público, gases y telemáticas (Internet)”, alertó la compañía interventora.

Pese a todo esto, el 26 de diciembre de 2023, el exsecretario de Infraestructura de Ibagué, Leonel Nieto, amplió por dos meses el plazo de ejecución de este contrato y le trasladó el problema a la alcaldesa Johana Aranda, quien, ante el cúmulo de irregularidades ordenó suspenderlo. Ver: (Suspendieron el contrato del puente de la calle 60)

Esta semana, una fiscal de la unidad de delitos contra la Administración Pública de Ibagué ordenó allanamientos simultáneos a las oficinas del Consorcio Puente Carrera Quinta y la sede de las empresas del contratista Olaguer Agudelo Prieto, ubicadas en el primer piso del edificio Camacol, en el barrio Belén.

Ahora inicia la etapa judicial de la historia del puente elevado de la calle 60, una obra que tal vez nunca debió contratarse.

Espere la segunda parte de esta investigación.