Curaduría no aprobó modificaciones en la cimentación de la gradería de la Unidad Deportiva de la 42
La ejecución del contrato 280 suscrito entre el Imdri e Hidripav para la intervención de las piscinas de la Unidad Deportiva de la calle 42 y cuya ruta crítica es la construcción de las graderías y de los pilotes que soportarán la estructura, continúa generando alertas para los órganos de control.
La Contraloría de Ibagué estableció que el Imdri no gestionó ante la Curaduría Urbana I la modificación de la licencia de construcción ante el cambio en la altura y profundidad de los pilotes, y que se originó porque los estudios de suelo existentes no coincidían con el material encontrado en el terreno, en su mayoría roca. (Ver: Se agudiza conflicto entre contratista de la Unidad Deportiva de la 42 y el Imdri)
El Curador Urbano I, en concepto presentado a la Contraloría de Ibagué, el 13 de mayo, sostuvo que debido a los cambios constructivos en la estructura de cimentación, era necesario que se realizara el trámite para modificar la licencia de construcción.
Lo que advierte la Contraloría es que tampoco hay registro del acta donde se aprobara la modificación en el diseño de construcción de los pilotes y es posible que se pueda estar ante una ilegalidad en la obra.
Sin licencias aprobadas se contrató
A lo anterior, la Contraloría de Ibagué certificó que una vez el Instituto publicó la licitación para la intervención de las piscinas de la Unidad Deportiva de la calle 42, la expedición de la licencia de construcción por parte de la Curaduría Urbana I no estaba en firme.
El Instituto publicó los pliegos de licitación en septiembre de 2018 y la resolución de la licencia fue expedida dos meses después, es decir, el 13 de noviembre de 2018.
De igual manera, esto sucedió con el contrato 276 para la construcción de estadio de fútbol en el Parque Deportivo, proceso que dio inicio en septiembre y la licencia solo se expidió por parte de la Curaduría Urbana II el 16 de octubre de 2018.
Según el argumento del Imdri, previo a dar inicio a los procesos de contratación había radicado todas las solicitudes de licencias ante la Cuarduría Urbana, por lo que "ya era un hecho real y cierto que se expediría la licencia de construcción respectiva".
Para la Contraloría no fue de argumento esto, pues denota falta de planeación por parte del Instituto en la etapa precontractual. (Ver: Se dilata la sanción contra el contratista de la Unidad Deportiva de la calle 42)