La historia de la madre que vendiendo empanadas sacó adelante a su familia
En las primeras horas de la madrugada, mientras muchos duermen, Daniela Sandoval ya está despierta, preparando una variedad de productos deliciosos que sus clientes disfrutan cada mañana.
Su puesto, ubicado en la glorieta del aeropuerto Perales, se ha convertido en un punto de referencia para quienes buscan un desayuno nutritivo y económico.
Esta es la historia de Daniela, una mujer de 45 años que hace cinco años, decidió emprender con un puesto de empandas para sacar adelante a su familia.
"Me levanto a las 2:00 de la mañana todos los días y estoy acá faltando un cuarto para las cinco. Preparo todos los alimentos frescos: salpicón, fruta por porción, tinto, café con leche, batidos, jugo de zanahoria, borojó con vitaminas. Todo se prepara fresco", expresó.
Sus hijos son un pilar fundamental en su vida: el mayor trabaja como instructor de conducción, mientras que el menor, Tomás, estudia ingeniería electrónica en la universidad.
A pesar de las dificultades económicas, Sandoval se esfuerza por mantener precios accesibles. Además de las bebidas ofrece productos caseros como empanadas de pechuga, buñuelos y tortas elaboradas con ingredientes naturales.
"Les ofrezco, aparte de la fruta, empanadas de pura pechuga, no tienen arroz ni papa, pandebonos, buñuelos, galletas de avena, tortas caseras deliciosas que se hacen con stevia, zanahoria, queso y banana", manifestó.
Asimismo, adaptándose a las nuevas demandas de sus clientes, Daniela implementó el pago por Nequi para facilitar las transacciones.
"Hace poco tiempo decidí implementar el sistema de pago por Nequi, porque aquí viene mucho empresario que no trae efectivo. Entonces abrimos el Nequi con el número 3112199523. Como manejo precios tan económicos, tan manejables, pues lo utilizamos", indicó.
Si usted desea apoyar este emprendimiento puede ir de lunes a viernes desde las 5:30 de la mañana hasta la 1:30 de la tarde y los sábados, domingos y festivos hasta las 5:00 de la tarde.