Dos preguntas, casi siempre acompañada la una de la otra, que creo que nos han hecho a casi todos los actores.
La vocación es algo que se lleva en la sangre. No es algo que prendes y apagas con un interruptor, o que vaya ligado a un contrato laboral, es algo que llevas dentro de ti.
Parece que, si eres actriz y no estás haciendo tv, una obra de teatro o una película, no eres tan actriz o estás retirada. Creo que por eso muchas personas terminan en depresión. Porque si eres profesor y no estás en un aula, o contador y no tienes unos balances frente a ti, o artista sin proyecto y así sucesivamente, entonces te sientes confundido, sin saber muy bien qué hacer con tu vida. La vocación que llevas dentro, mas las herramientas que vas aprendiendo durante tu vida, también se pueden poner a disposición de otras actividades.
El COVID nos está dejando claro que nuestra situación laboral puede cambiar en cualquier momento. Permanecerás activo si tienes la suficiente capacidad de adaptación más una dosis de creatividad. Todo lo que aprendemos en la vida, no necesariamente en el colegio o en la universidad, nos puede servir para salir de situaciones como la actual. En este momento millones de personas han perdido sus trabajos o sus negocios. En nuestras manos está preguntarnos; qué puedo hacer con el conocimiento y la experiencia que tengo en mi cabeza. Cómo puedo convertir eso en un negocio. Y sobre todo, y para mi lo mas relevante, ¿Puede esa destreza ayudar de alguna manera a la sociedad?. Estoy segura de que sí. Algo de lo que usted sabe puede ponerse en producción, convertirse en negocio y ademas ayudar en algo a los demás.
Debemos entender que la “antigua normalidad” no volverá nunca, o que tomará mucho tiempo en hacerlo. Así que podemos seguir quejándonos de la situación o nos plantamos frente a ella y replanteamos lo que vamos hacer y cómo lo vamos a hacer. Soy actriz, esa es mi pasión y lo que estudié. En el fondo lo que hice siempre es comunicar. Eso quiere decir que también podría escribir un libro, una columna en un periódico, hacer un podcast, crear contenido de redes, escuchar, aconsejar y canalizar ayuda a los demás etc.
Honestamente, no es una profesión fácil; cuando te quedas sin trabajo, difícilmente te contratan en una empresa solo por saber comunicar. Sin embargo, puedo hacer uso de mi creatividad, y salir adelante, como lo estoy haciendo, con esas habilidades ligadas a la comunicación. Usted puede hacer lo mismo. Usted tiene muchas habilidades, unas estudiadas y otras adquiridas por experiencia, que puede usar en este momento de forma diferente. La zona de confort es un lugar peligroso y a lo mejor la vida nos está sacando de ella por algún motivo.
Por ultimo los dejo con esta frase: “El caparazón debe romperse antes de que el pájaro pueda volar”, Alfred Tennyson; talvez el momento de volar sea justo ahora. #HEDICHO