Universidad del Tolima inauguró su moderno Hospital Veterinario en el sur de Ibagué

Fue todo un acontecimiento. Hubo una concurrida ceremonia, un concierto y una emocionante y esperada inauguración. Al fin y al cabo, se trataba de la entrega de la primera gran obra pública que se concluye en los últimos ocho años en Ibagué.

La Universidad del Tolima, con el liderazgo del rector Ómar Mejía y el apoyo del consejo directivo de la institución, logró sacar adelante el Hospital Veterinario Bernardino Rodríguez, ubicado en el barrio Miramar, en el sur de la capital tolimense.

Este moderno centro asistencial, de 3.000 metros cuadrados, cuenta a partir de este viernes con consulta general y especializada, diagnóstico por imagen, diagnóstico y atención cardiopulmonar, cirugía general y especializada, anestesia y manejo del dolor, hospitalización, cuidado crítico, urgencias 24 horas, farmacia, laboratorio clínico y patología y central de esterilización.

Además, cuenta con un auditorio de 500 metros cuadrados y una subestación eléctrica.

“Es un día muy importante para la Universidad del Tolima y ustedes son testigos de ello. Hoy le entregamos a la región y al país, el primer Hospital Veterinario del departamento, con unas condiciones de calidad suprema, no solo por su infraestructura física, moderna y única en Colombia, sino por la dotación tecnológica que posee. Según expertos de diferentes partes del mundo -que ya nos han manifestado su deseo de trabajar aquí-, esta obra nos ubica en un punto muy alto a nivel continental”, dijo Ómar Mejía, rector de la UT.

El Hospital Veterinario lleva el nombre de Bernardino Rodríguez, como homenaje al primer decano de la facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad del Tolima.

Finalmente, Mejía agradeció a los integrantes del consejo directivo de la UT, a su equipo de trabajo y uno de los profesores que sintió como propio el desarrollo de este centro asistencial: Diego Fernando Echeverry.

“A todos y cada uno de los trabajadores y obreros que pusieron su granito de arena, y especialmente al ingeniero William Cardona (el único de los tres integrantes del consorcio que cumplió), a quien le reconocemos su compromiso, su voluntad y sus esfuerzos por hacer de este proyecto, una gran obra para nuestro departamento”, expresó el rector.

Es importante recordar que la ejecución de este proyecto tuvo múltiples tropiezos durante la administración del cuestionado exrector José Herman Muñoz, quien hizo irregulares desembolsos a los otros dos integrantes del polémico consorcio del que hicieron parte los ingenieros Renee López Roa y Jorge Eduardo Borgogno. A este último contratista le giraron, a su cuenta personal, $765'758.078 y ese dinero sigue embolatado y la Fiscalía General de la Nación en silencio. (Ver: El oscuro parto del nuevo 'elefante blanco' de Ibagué: el hospital veterinario de la UT) (Ver: Así participó José Herman Muñoz en las irregularidades del Hospital Veterinario)

La obra permaneció varios meses paralizada y, en agosto de 2017, el rector Mejía y el ingeniero William Cardona lograron un acuerdo que se materializa hoy con una obra concluida a satisfacción.