El uso excesivo de dispositivos móviles afecta la salud mental

La era de la digitalización ha traído consigo un grave problema de adicciones y uso sin control de dispositivos móviles y aplicaciones.

En la cotidianidad, estar con el celular en la mano y conectado casi el 100% del tiempo a internet es la realidad de jóvenes y adultos, quienes han normalizado su uso constante sin dimensionar las consecuencias en la salud mental.

El doctor y terapeuta ocupacional, Andrés Patiño, señaló que esto es un problema de salud pública que invita a reflexionar acerca de la salud mental, ya que la tecnología incide de manera directa en su estabilidad.

El profesional en la salud enfatizó que situaciones como estar pendientes todo el tiempo de lo que pasa en las redes sociales y los excesos de trabajo que requieren siempre estar conectados promoverían los problemas de salud mental.

Asimismo, agregó que están tratando de describir medicamente algunos síntomas, entre ellos la textofrenia, que es la ansiedad que genera la idea de estar recibiendo notificaciones en un dispositivo móvil o de cómputo sin que en realidad esto ocurra.

“Otra de las patologías que está generando muchos problemas a nivel mundial, sobre todo en niños y jóvenes, es el tema del “vamping”, que es aquel niño o joven que no tiene un buen contacto social con su entorno, no se relaciona con familia, y en horas de la noche se mete debajo de sus cobijas, se aísla del mundo y empieza a navegar en contenido”, expresó el especialista.

¿Quién tiene el control?

Por su parte, la psicóloga Iréne Rodríguez, consultora en educación, puntualizó que cada vez estamos frente a nativos digitales con más dependencias de herramientas y programas, con menos capacidades para comunicarse efectivamente y afectivamente entre sujetos reales, y con menos desarrollo de funciones como la memoria y la atención, que ahora están muy interferidas por el uso de dispositivos.

“Ya hay tendencias en Suecia y en Estados Unidos donde están planteando la posibilidad de reducir el uso de dispositivos electrónicos y volver a la escritura y a otros procesos de contacto con la realidad, que le permita a los niños desarrollar las capacidades que se le entregaron a las máquinas”, manifestó Rodríguez.

Algunas de las recomendaciones que comentan los profesionales para controlar este tipo de comportamientos es aprender a poner límites y establecer horarios de desconexión, activar las funciones del celular que le ayudan a bloquear las apps y el uso del teléfono, tratar de socializar con las personas de manera presencial, y en el caso de presentarse un nivel de dependencia alto, visitar a un profesional.