Sec. de Educación del Tolima no estaría de acuerdo con que estudiantes vuelvan a la presencialidad

La Gobernación del Tolima parece no estar de acuerdo con las directrices del Ministerio de Educación Nacional acerca del regreso a las aulas de clase de los colegios públicos y privados del departamento. (Ver: Estudiantes y docentes deberán volver a clases presenciales al finalizar las vacaciones: Mineducación)

Julián Gómez, secretario de Educación Departamental, reconoció que la infraestructura física de las instituciones educativas, tanto rurales como urbanas, no es apta para los estudiantes en medio de la pandemia del COVID-19.

De hecho, según el funcionario, existen 212 colegios con 1.840 sedes en el Tolima. De este total, hay:

• 59 instituciones en zona rural que necesitan ser reubicadas o reconstruidas.
• 60 que no tienen agua potable.
• 344 que no cuentan con comedor escolar.
• 1.251 sedes cuya titularidad del predio no es de los municipios.

Asimismo, Gómez aseveró que, aunque no tener la titularidad impediría al Gobierno invertir recursos en predios privados, a través del Fondo de Emergencias (Fome) se les está girando, desde la semana pasada, a todos los rectores de las instituciones educativas para que hagan las adecuaciones necesarias y se pueda retornar a la presencialidad.

"Como estamos en emergencia no hay ningún impedimento para invertir en esas sedes. Entonces, hoy están recibiendo todos los rectores recursos para hacer algún tipo de inversión en mantenimiento y adecuación de baterías sanitarias", indicó. 

También, puntualizó que hay una deuda de hace más de 50 años con la infraestructura educativa en el Departamento, pero no se puede dar solución a todo con el tema del COVID-19.

"Le hemos dicho al Ministerio: ¿cómo hacemos con el tema de agua potable?, y la respuesta del Ministerio es: para usted lavarse las manos no necesita agua potable. Les decímos ¿qué hacemos con las instituciones que no tienen agua?, nos dicen: para eso existe el alcohol y el gel antibacteria ", indicó el funcionario.

Por su parte, explicó que el Gobierno Departamental se encuentra gestionando $5.900 millones de recursos de regalías para adecuar 40 instituciones educativas y 300 más con las alcaldías municipales.

"Lo que uno le dice a los rectores y a la comunidad en general es que el COVID-19 no atacó las baterías sanitarias. Así como se trabajaba hace dos años con las mismas deficiencias, es claro que se puede avanzar en poder entregar hoy a los niños la educación que requieren, indistintamente que las baterías estén funcionando o no", concluyó.