Parque Natural Regional Loros Andinos en Roncesvalles será declarada como área protegida

Al occidente del Tolima, los habitantes del municipio de Roncesvalles vienen trabajando arduamente de la mano con Cortolima y entidades como la Fundación ProAves para recuperar la población del loro orejiamarillo. El resultado, tras 20 años de labores, fue pasar de 80 a 4.000 individuos.

La recuperación de esta especie de ave, que estuvo en riesgo de desaparecer en la década de los 90, es un gran logro para el departamento y el país, pues según algunos expertos, los loritos solo se encuentran en los Andes tropicales. 

Teniendo en cuenta la importancia de los orejiamarillos, Cortolima inició el proceso para lograr que se declaren 4.615 hectáreas como el área protegida Parque Regional Natural Loros Andinos. La directora Olga Lucía Alfonso Iannini explicó que la propuesta ya fue presentada ante el consejo directivo de la Corporación para su aprobación. 

“Queda el estudio por parte del Consejo y estamos a la espera que el Instituto de Investigación Alexander von Humboldt también nos dé su concepto de viabilidad para que finalmente, ojalá antes de terminar este año, pudiéramos tener este nuevo parque en esta zona de importancia estratégica”, precisó Alfonso Iannini. 

Otra de las características de esta zona es que es un corredor de conservación y tiene un complejo lagunar donde nacen los ríos Cucuana y Cucuanita.   

Igualmente, hay 115 especies de flora, 10 de especies herpetos (anfibios y reptiles), 26 de mamíferos y 167 especies de aves. 

Por su parte, Fabio Arjona, vicepresidente de Conservación Internacional (CI), señaló que el Tolima es uno de los departamentos más biodiversos del país, igualmente, enfatizó en que Roncesvalles es el hogar de cuatro especies de loros que son endémicos. 

“El más significativo es el loro orejiamarillo que a principio de siglo se iba a declarar extinto y fue reencontrado en Roncesvalles, una pequeña población de 60 ejemplares, eso dio paso para crear una estrategia para evitar la extinción de esta especie y la protección de su nido de anidamiento, que es la palma de cera. Pasó de ser una especie críticamente amenazada a vulnerable”, expuso Arjona.    

La directora de Fundación ProAves, Sara Inés Lara, expuso que es necesario también proteger las palmas, pues son indispensables para la reproducción, “el hábitat es clave porque no se encuentra en otras partes de la forma que se encuentra en esa zona”.  

Igualmente, se espera que en el marco del acuerdo de entendimiento con la Asociación de Corporaciones Autónomas Regionales y de Desarrollo Sostenible, Asocars, se dé continuidad  a la educación ambiental y a la investigación científica.