Incendios forestales en el Tolima han consumido el 25% del bosque seco
El Tolima sufrió una de las catástrofes ambientales más graves en su historia, los incendios forestales registrados en cerca de 30 municipios del departamento dejaron afectadas a más de 10 mil hectáreas de cobertura vegetal y consumieron el 25% del bosque seco de la región.
La directora de Cortolima, Olga Lucía Alfonso, realizó un balance de las pérdidas ambientales que dejaron estos incendios forestales, incluso catalogó el incendio registrado en Natagaima como un 'mega incendio'.
“Este puede ser uno de los mega incendios que se han registrado, dada la cantidad y el tamaño de bosque seco que se perdió, pues más de 10 mil hectáreas fueron afectadas, eso representa el 25% del bosque seco total de nuestro departamento que es un área muy representativa, además de la fragilidad de este ecosistema y la importancia ecosistémica que tiene”, manifestó Alfonso.
Los incendios no solo fueron devastadores en Natagaima, otros municipios del sur del Tolima también sufrieron serias afectaciones en varios tipos de bosque del ecosistema de esta zona montañosa.
“Tuvimos afectaciones del bosque húmedo montano en el municipio de Planadas y Chaparral, el bosque húmedo tropical, el bosque húmedo premontano en Villarrica, el bosque muy húmedo premontano y el bosque húmedo premontano nuevamente en Ataco, Villarrica y Chaparral", dijo la directora.
Además, algunas áreas de bosque protegidas del departamento también se vieron afectadas en una proporción considerable.
“Es importante plantear también que, aunque no fue una gran extensión sí hubo afectaciones a áreas protegidas como el bosque de Galilea, que se afectó en 20 hectáreas, además de la reserva de Yaví en el municipio de Natagaima, que tuvo una enorme afectación de más de 4 mil hectáreas”, explicó la funcionaria.
Asimismo, la directora de la autoridad ambiental de la región, aclaró que se debe realizar una investigación más detallada para determinar el daño que sufrió la flora y la fauna de estas áreas afectadas por las llamas.
“Habrá que hacer una revisión ya mucho más profunda de la de las afectaciones a nivel ambiental, las afectaciones a la flora y la fauna, por supuesto, y seguramente tendremos que generar un plan de recuperación de esos ecosistemas de manera articulada con todas las entidades que nos puedan aportar en esto”, concluyó Alfonso.