Contraloría advierte mala calidad en la pavimentación de la vía Palocabildo - San Jerónimo - Casabianca
A tan solo nueve meses de haberse entregado la pavimentación de la vía Palocabildo - San Jerónimo - Casabianca y cuya inversión alcanzó los $20.760 millones, recursos pertenecientes al sistema general de regalías, la obra presenta fisuras y descascaramiento de la carpeta asfáltica. Así lo advirtió la Contraloría General República, que precisó hubo una mala calidad en la ejecución de los trabajos.
El contrato fue adjudicado por la Gobernación del Tolima en 2018 a la Unión Temporal San Jerónimo, y de la cual hacían parte Aitor Mirena de Larrauri y el ingeniero Luis Ricardo Ortigoza. La inversión inicial estaba por la suma de $16.147 millones, pero se le adicionó $4.612 millones. La obra fue terminada en abril del año pasado.
"Se observa en algunos tramos del pavimento flexible una serie de patologías y deficiencias en la vía, tales como micro fisuras, piel de cocodrilo, arreglos en mal estado, como parches y en algunos puntos desgaste del pavimento con pérdida de finos", señaló en su informe de auditoría la Contraloría General.
El órgano de control resaltó que el área afectada corresponde a 433.7 metros cuadrados.
A lo anterior, se suma un posible sobrecosto por la suma de $21 millones por el cargue, transporte y retiro de material sobrante. Según el ente de control fiscal, hubo un sobre precio de $280 en el metro cúbico. El lugar aprobado para botar los escombros estaba ubicado a 10 kilómetros de la obra.
Por último, la Contraloría destacó la falla de la interventoría y la cual fue asumida por el Consorcio A&L, cuyo representante legal fue Argelio Cerquera Araujo.
"No se cumplió a cabalidad con realizar labores de control y vigilancia (...) toda vez que se evidenciaron fallas en la calidad del contrato de licitación pública, además de mayores costos identificados en el ítem de transporte de materiales provenientes de cargue y retiro de sobrante", reseña el informe.
El ingeniero Luis Ricardo Ortigoza ha sido objeto de señalamientos por la deficiente durabilidad de las vías intervenidas. Un ejemplo, fue la pavimentación de la avenida Guabinal, en Ibagué, para la vigencia 2010 y que en menos de seis meses de haber sido intervenida, presentó fisuras en la carpeta asfáltica.