Continúa el hambre burocrática del barretismo: ahora se quedó con la Defensoría del Tolima
Aumentó el poder burocrático del barretismo con el nombramiento de Alexander Tovar como nuevo Defensor del Pueblo del Tolima.
Ese importante cargo departamental estaba en manos de José Elver Hernández ‘Choco’, a través de la anterior Defensora del Pueblo, Gavy Gómez Angarita.
EL OLFATO supo que Tovar llegó a este puesto porque no clasificó en el gabinete de la gobernadora Adriana Matiz, al parecer, por presuntas investigaciones en su contra.
El barretismo entonces le dio como premio de consolación la Defensoría del Pueblo, seccional Tolima.
El sueldo de Tovar en esa entidad estaría bordeando los $15 millones mensuales y bajo su mando (y el de Óscar Barreto) estarían más de 40 empleados de planta y cerca de 150 contratistas. Una gran tajada burocrática para repartir puestos.
El barretismo ahora controla la Gobernación, la Universidad del Tolima, el Hospital Federico Lleras, Cortolima, unas 30 Alcaldías del departamento en asocio con otros partidos políticos y a todas esas entidades se anexa la Defensoría del Pueblo.
Con el nombramiento de Tovar, además, se confirma la distancia que se ha creado entre el barretismo y el choquismo, al que le acaban de arrebatar otro poder de las manos.