Municipio de Villarrica debe ser reubicado antes de que suceda una catástrofe: Diputado Reyes
“Villarrica debe ser reubicada en su totalidad y pronto, antes de que pueda suceder alguna catástrofe”. Esta fue la advertencia que el diputado liberal, Carlos Reyes, le expuso a EL OLFATO sobre la situación geológica que vive este municipio.
Aunque Reyes aseguró que este tema se viene denunciando desde hace más de 23 años, ahora se cuenta con total seguridad de que es una problemática que requiere de toda la atención de las autoridades departamentales y nacionales, ya que el Servicio Geológico Colombiano, acaba de presentar un estudio sobre las condiciones físicas de Villarrica.
“Esta entidad presentó ayer en la Asamblea Departamental un estudio que venía realizando meses atrás. Lo que determina es que el casco urbano del municipio de Villarrica se encuentra en alta amenaza y vulnerabilidad”, puntualizó Reyes.
Este estudio, según explicó Gabriel Avellanada, funcionario del Servicio Geológico Colombiano, muestra los riesgos que tiene este municipio, las cuales obedecen a una estructura natural del mismo territorio, “una geología con alto grado de complejidad, que se ve mayormente afectada por las condiciones detonantes a las que se ven enfrentadas como sismos y lluvias”, explicó.
Es que de acuerdo con información que ha compartido la Contraloría en los últimos dos años, los fenómenos geológicos de reptación, deslizamientos y remoción en masa tiene en riesgo la zona céntrica comercial y residencial del casco urbano, una situación que ha generado el colapso de más del 80 % de las viviendas del municipio, afectando a aproximadamente 5.000 habitantes.
Ante esto, el Instituto Geológico propuso como solución dos proyectos de mitigación. “Lo primero es hacer unas intervenciones para que se disminuya esa amenaza, una obra muy grande que costaría más de $ 130.000 millones. La segunda, que serían adecuaciones a las viviendas, las cuales también tendrían un costo alto. Sin olvidar, que son proyectos que se demorarían bastante en desarrollarse”, declaró Reyes.
Asegurando además que estas son soluciones con las que no está de acuerdo, manifestando que no son una salida real a la problemática que viven los villariquenses y que la única opción es la reubicación total de sus habitantes.
“La Gobernación del Tolima no lo hace porque tendría que invertir gran parte de sus recursos y así no podría hacer inversión en el resto del departamento. Lo que les puede es el miedo porque no tendrían la plática para la campaña en los otros municipios ahora que se vienen las elecciones de gobernadores”, indicó.
Reyes recordó catástrofes como las acontecidas en Armero y Mocoa, desastres que, según él, pudieron evitarse si las autoridades hubieran tomado las medidas de prevención a tiempo.
Ahora, pide que el informe que construyó el Servicio Geológico sea remitido al Gobierno Nacional, quien estará en la obligación, después de ser notificado de la situación, de encabezar los procesos para ayudar a este municipio.
“Ese informe debe mandarse, incluso, al presidente de la República, porque hay que reubicar el pueblo en otro lado, principalmente seis barrios porque si no las quebradas y afluentes que pasan por ahí se los van a llevar. Así que le pido al gobernador que decrete el casco urbano del municipio como zona de riesgo no mitigable y se inicie inmediatamente las medidas necesarias”, concluyó Carlos Reyes.
Villarrica exige acciones inmediatas
El Concejo Municipal de Villarrica, encabezado por su presidente Manuel Enrique Moreno expusieron a este medio que están trabajando en el esquema de Ordenamiento Territorial para poder avanzar y declarar un lote como zona urbana y así poder iniciar con el traslado de las familias que se encuentran en mayor riesgo.
“Ya tenemos localizado un lote de 112 hectáreas, pero el municipio no tiene el dinero para esta compra, por eso necesitamos que el gobierno local o nacional apliquen los recursos necesarios. Es fundamental una reubicación total, pero al menos podemos ir trasladando las personas que presentan mayor alto riesgo, como son las 60 familias de la quebrada El Botadero y las 28 del barrio Obrero”, indicó Moreno.