El ruido de la Parroquia del Espíritu Santo tiene aturdidos a los habitantes de El Jordán
Las lecturas bíblicas y los cantos que se profesan todos los días en la Parroquia del Espíritu Santo tienen a los habitantes de la Octava etapa de El Jordán sin poder conciliar el sueño.
“Tenemos un problema auditivo acá en la iglesia. Lo que pasa es que le ponen demasiado volumen a los parlantes. No nos dejan dormir; vamos a hablar, no podemos; queremos ver televisión, no se puede. El sonido es demasiado fuerte, nos vamos a quedar sordos”, manifestó Martha Liliana Cuéllar, habitante del sector.
A lo anterior, se suma que de lunes a domingo la eucaristía comienza desde las 7:00 a.m., despertando a algunos ciudadanos que descansan en horas de la mañana.
“Se escucha mucho cuando uno está durmiendo. A las 7:00 a.m. empieza a sonar muy duro. Los domingos es cuando más duro se escucha”, expresó Julián Gallo.
No obstante, no solo quienes residen en el sector están inconformes con los elevados niveles de los parlantes sino también aquellos que tienen negocio en el Jordán.
“El volumen es bastante alto. Hay misa a las 4:00 p.m. Los 14 de cada mes el volumen es muy alto. Esto es residencial y comercial y deben tener un volumen para la iglesia no para el público”, precisó una comerciante.
Frente a las quejas, EL OLFATO habló con el sacerdote Oscar Fabián Morales, vicario de la Parroquia, quien manifestó que no tenía conocimiento de que el volumen de las eucaristías molestaba a los habitantes.
“Hasta ahora nos hacen saber la queja relacionada con el ruido. Lo tendremos muy presente y trataremos de no interferir en las actividades cotidianas de las personas”, indicó el sacerdote.
Los habitantes esperan que el volumen de la iglesia disminuya, para volver a conciliar el sueño.