Paciente de cáncer labora desde la habitación del Federico Lleras para autosostenerse
Un espíritu de emprendimiento acompaña la vida de Ember Adrián Vargas, un pereirano de 48 años que salió a labrar su futuro en Bogotá, pero por los inesperados cambios de la vida, terminó viviendo en El Espinal.
Estando en la capital del país laboraba vendiendo flores o en el oficio que le saliera, sin embargo, algunos quebrantos de salud le generaron la necesidad de volver a su tierra natal.
“Me regresaba para Pereira, cuando llegué a El Espinal, una amiga me dijo que necesitaban un empleado en un hotel. La idea era quedarme unos días, pero como era nocturno el trabajo, se me desarrolló rápido la enfermedad y en un mes estaba hospitalizado. Duré cinco meses en la sede la Francia del hospital Federico Lleras Acosta”, narró.
#Historia | Paciente de cáncer labora desde la habitación del Federico Lleras para autosostenerse: https://t.co/t8C287VV5d pic.twitter.com/JynHqqTDMa
— El lfato (@Elolfato) September 8, 2023
El diagnóstico de Ember, es cáncer no Hodgkin una enfermedad que ataca el sistema linfático. Debido al tratamiento y atención brindada en el principal centro asistencial de la región, tomó la decisión de quedarse en El Espinal.
En medio de la ausencia de su familia, las plantas han sido uno de sus principales refugios.
“Siempre me ha gustado mucho la decoración, en alguna ocasión vi a una señora en Bogotá, le dije que me enseñara y dijo que no, que su arte no se lo enseñaba a nadie. A escondidas le tomé foto a lo que estaba haciendo y me dije: yo soy capaz y voy a hacerlo mejor”, narra entre risas el pereirano.
La creatividad que lo caracteriza, le permitió empezar a experimentar con terrarios en arena. Su inspiración son los paisajes y los acuarios. “Las figuras son a base de arena, voy colocando la arena e imaginando las formas”, expresó.
Los terrarios terminaron convirtiéndose en la fuerza que le permite a este hombre afrontar las quimioterapias, los largos periodos de hospitalización e inclusive la depresión. Además, “llevo cuatro meses en los que no he podido trabajar, es muy difícil que me empleen”, acotó.
Tras recibir autorización por parte de la profesional médico que atiende su caso, le dio rienda suelta a su talento e imaginación, por lo que desde una habitación del Federico Lleras sede Limonar, está creando diferentes piezas, que han tenido éxito entre las enfermeras y personal médico.
Aunque Ember se estaba alistando para salir esta semana del hospital, una baja en las defensas le obligó a prolongar su estadía por unos días más, pero esto no es impedimento para seguir trabajando en los pedidos.
“Tener cáncer no impide hacer algo para trabajar, estando conectado a toda la quimioterapia hice todo el trabajo, se me hincharon los pies, pero saqué todo el trabajo porque no me dolía nada".
Y agregó: "Mientras no me duela nada, yo hago lo que tenga que hacer, uno no se puede limitar, tengamos a Dios en nuestro corazón y él nos da la fortaleza para poder continuar”.
Las personas que quieran adquirir alguna de las decoraciones, pueden comunicarse al 320 8853206.