La pavimentación de la avenida Mirolindo fue una “chambonada” y en seis meses podría deteriorarse de nuevo

La pavimentación del carril de descenso de la avenida Mirolindo, entre el sector de la Fiscalía y la glorieta de la calle 84, fue una verdadera “chambonada” y los más de $2.140 millones que invirtió la Alcaldía de Ibagué en esa obra podrían perderse pronto.

Dos importantes ingenieros de la ciudad, expertos en este tipo de obras, hablaron con EL OLFATO sobre las irregularidades técnicas cometidas en este proyecto, que entregó hace poco menos de un mes la famosa firma contratista Asfaltemos. 

Ambos, por obvias razones, pidieron que sus nombres se mantuvieran bajo reserva, ante el temor de retaliaciones contractuales por parte del saliente gobierno de Andrés Hurtado, quien también es ingeniero y especialista en pavimentos.

Uno de las fuentes sostuvo que en estos trabajos no hubo ningún tipo de planeación y que tal vez el propósito fue aplicar el pavimento y pasar la factura. 

“Se hizo un trabajo que le faltó planeación. Se hizo sin pensar en la durabilidad de la obra. Lo hicieron solamente por echar y cobrar el asfalto. Lo primero que debieron hacer fueron los filtros y las cunetas del lado derecho, para evitar lo que está presentándose: que el agua se está empezando a filtrar por debajo y, tal vez en seis meses, ese pavimento se va a dañar. Si eso n o se corrige, en poco tiempo volveremos a ver los mismos huecos”, explicó uno de los ingenieros.

Aseguró que la Secretaría de Infraestructura podría ejecutar esas obras complementarias y evitar el inminente detrimento patrimonial. 

Las imágenes captadas por un equipo de EL OLFATO muestran precisamente que regresaron los empozamientos de agua en los mismos tramos donde estaban los huecos que tapó la firma Asfaltemos. 

“Si no se hacen los filtros y las canalizaciones de aguas lluvias la estructura se va a humedecer y los huecos estarán siempre ahí. Ellos (Asfaltemos) simplemente hicieron un fresado y vamos a estar contentos por unos tres o seis meses. Los más beneficiados son los señores de Asfaltemos, que, seguramente, en poco tiempo los volverán a llamar para que tapen otra vez los huecos”, agregó el otro ingeniero. 

Entre la Fiscalía y la zona de los concesionarios de autos se intervinieron 11.589 metros cuadrados y se pagaron $1.748 millones por la pavimentación. 

Y en la glorieta Mirolindo, que tiene un área de 4.000 metros cuadrados, se invirtieron $392.618.639, informó la Secretaría de Infraestructura de Ibagué.