Ancizar Cifuentes: un tolimense que ha presenciado la desaparición del cóndor de los Andes

Ancizar Cifuentes es un campesino tolimense que vive a 3800 metros sobre el nivel del mar. Desde allí, es uno de los vecinos del cóndor de los Andes, el ave emblemática –y en vía de extinción– del país.

Su finca se ubica en el municipio de Santa Isabel, en la zona del páramo, y a ella se llega a caballo en un recorrido de cinco horas por la falda de la montaña.

Él cuenta que en su finca veía hasta ocho de estas aves, pero le preocupa que ahora –si acaso– llega a ver dos con un largo tiempo de diferencia.

“Es un ave emblemática que está en peligro de desaparecer. Esta especie ha venido disminuyendo con el tiempo”, señaló.

En los últimos años, el ave se ha enfrentado a un preocupante declive de su población, debido a envenenamientos, captura ilegal y disparos de fuego.

Por eso, para don Ancizar lo más importante es que sus vecinos y la comunidad entiendan que el cóndor no representa ningún peligro para el ganado, ni las ovejas, ni los cultivos, ni demás animales de las veredas.

Por el contrario, al ser un ave carroñera presta un servicio de limpieza al ecosistema, pues previene la propagación de virus y bacterias que se producen por los animales en descomposición de la zona.

Jornadas de sensibilización en el día nacional del cóndor

El pasado siete de agosto se celebró el día nacional del cóndor andino y la Corporación Autónoma Regional del Tolima, Cortolima, realizó jornadas de sensibilización y cuidado sobre este vigilante de las montañas en los municipios de Santa Isabel y Murillo.

Según un censo realizado a principios del 2021, en Colombia solo se registran 63 individuos, a los cuales hay que restarles los tres que fueron hallados envenenados a mediados de mayo en Santander. Una cifra que alerta a las autoridades ambientales del país y el continente suramericano.

En el departamento del Tolima, el cóndor andino ha sido avistado en los municipios de Murillo, Santa Isabel, Cajamarca, Ibagué, Anzoátegui y Villahermosa.

“Es muy importante conservar y cuidar el cóndor, ya que no representa ningún peligro para la sociedad, ni para nosotros los propietarios de fincas o ganaderos. Incluso nos están haciendo un favor, comiéndose a esos animales que por algún motivo mueren dentro de la finca", enfatizó don Ancizar Cifuentes.