Familia regala desayunos a habitantes de la calle en la plaza de la 14 en Ibagué
Un gesto de amor puede salvar el mundo: así es como describen un padre y sus tres hijos la iniciativa de entregar desayunos a habitantes de la calle en la plaza de la 14 en Ibagué.
A sus 22 años, Juan David Cárdenas Guzmán ha sido el promotor de esta labor, pues sus motivaciones personales y el ejemplo de sus padres, lo han inspirado a ser un apoyo para los más vulnerables.
“Lo que me motivó a realizar esta acción tan bonita fueron distintas cuestiones personales, las cuales me han sucedido a lo largo de toda mi vida. Entonces, en este momento, quise dar mi granito de arena para recordarles a los habitantes de la calle que ellos también son personas”, dijo Cárdenas.
Así pues, con las ollas llenas de comida, platos y vasos desechables, y la mejor disposición, brindan alimentos a quienes pasan por el sector o se acercan al desayuno colectivo: porque, como dicen por ahí, donde comen cuatro, comen cinco.
“La actividad se trata de integrar a las personas, sin importar el estrato socioeconómico (…) Les estamos proporcionando alimentos como: caldos de pajarilla o de costilla, limonada, patacona, arepas, entre otras cosas. Es una actividad sencilla, pero lo importante es hacerla desde el corazón”, indicó con orgullo.
Las personas, sentadas en los andenes y de pie sobre la acera, se disponen a desayunar algo, que, aunque no sea mucho, es suficiente para calmar el hambre.
“Estoy convencido de que no es mucho lo que se aporta en especie, pero si es decir que estamos con ellos, que estamos con la población humilde y que le llevamos un mensaje de solidaridad y amor”, expresó Luis Alberto Cárdenas, padre de Juan David.
“Decirles que no están solos y que, en la medida de nuestras posibilidades, nosotros también podemos aportar nuestro granito de arena para que ellos puedan tener un día agradable”, añadió.
Este hombre ha sido un ejemplo para sus hijos, pues desde hace mucho tiempo se ha dedicado a realizar esta labor y otras similares en distintos municipios de Colombia y el Tolima.
“Mis hijos están hoy interesados en todas esas actividades, entonces eso es lo que me llena. Yo lo hago porque también tuve mentores, quienes desde pequeño me enseñaron y mi Dios en ese momento me dijo: hay que aportar algo a las personas”, puntualizó.
El mensaje que retumba en sus mentes al hacer estas acciones es el de entregar amor, por ello, quieren hacer un llamado “para la gente, cuando encuentre a una persona en condición de calle, no tienen necesidad de regalarle dinero, con el solo hecho de tratar de escucharlos y ver en qué le pueden colaborar, es suficiente mientras nazca desde el corazón”, concluyó Juan David.