El drama que vive una ibaguereña en Italia por cuenta de la masiva expansión del coronavirus
La ibaguereña Adriana Montoya vive hace más de tres años en Génova, Italia, una ciudad de ensueño en la que jamás creyó que pasaría los momentos más desconcertantes y agobiantes de su vida. (Ver: Inpec suspende visitas a la cárcel de Picaleña mientras adoptan protocolos para prevenir el coronavirus)
Italia se ha convertido, desde hace unas semanas, en uno de los países que más preocupa a la comunidad internacional a causa de la masiva expansión del COVID-19, que hasta la fecha registra cerca de 15.000 contagiados y más de 1.000 muertos.
Una situación que tiene en vilo a todos sus habitantes, entre ellos, esta tolimense. Adriana, quien vive con su hermana en esta ciudad ubicada al norte de Italia, cuenta que, aunque tratan de estar en calma, la situación es bastante compleja.
“Hoy Italia está totalmente cerrada y aislada. Acá no tenemos forma ni de salir ni de que otras personas entren. No podemos salir de la ciudad, no podemos salir de las casas, todo el mundo está en cuarentena, porque esa es la medida que se tomó. Solo están abiertos los supermercados, las farmacias y los bancos”, narra.
Al parecer, solo pueden salir de casa si tienen alguna emergencia, como ir a comprar comida o algún medicamento. O aquellos que trabajan en lugares muy específicos como centros de salud, fábricas de alimentos, así como a los empleados de supermercados y farmacias. (Ver: Gobernación declara alerta amarilla en el Tolima por posible llegada del coronavirus)
“La Policía, si tú sales de la casa, te puede parar y preguntarte qué vas a hacer y uno tiene que demostrar si va al trabajo o a la farmacia, porque llegaron al punto de multar a las personas. La regla es que nadie salga, pero si se hace tiene que ser con tapabocas, conservando un metro de distancia de otras personas, no salir en grupos, máximo dos personas en un carro y lavarse las manos siempre que se entre y salga de la casa”, detalla esta tolimense sobre esta cuarentena.
Afectaciones a la economía
Montoya explica que, al ser esta cuarentena una cuestión gubernamental, por Ley, a las personas que no van a trabajar las empresas deben seguir pagándoles sus sueldos. El problema es para las empresas y aquellos que trabajan por horas.
“El problema es para las personas que tienen sus empresas y para quienes viven prácticamente del día a día, que no tienen un contrato fijo de trabajo. Por ejemplo, yo al menos cuento con media jornada asegurada, pero tenía otras horas adicionales de trabajo no registradas por las que claramente no recibo dinero, pero hay personas que simplemente no cuentan con ninguna otra entrada”, revela esta ibaguereña.
Una situación ante la cual el Gobierno ha intervenido, tratando de ayudar a estas personas vulnerables. No obstante, la preocupación recae en hasta dónde podrá ayudar el Estado si el tiempo avanza y los casos de contagio por coronavirus siguen aumentando.
Y es que no solo es el tema salarial, los precios de algunos productos y el desabastecimiento también los mantienen en alerta. (Ver: Gobierno Nacional suspende eventos de más de 500 personas en Colombia)
“Los precios de los alimentos no han subido, pero sí los de los productos de higiene como los geles antibacteriales, el papel higiénico, de una manera exagerada. Además, que toca ir en horarios muy específicos, por ejemplo, a muy tempranas horas de la mañana porque el agua se la consumen velozmente, así como la fruta y los mismos productos de higiene, a veces uno encuentra es los stands vacíos”, comenta Adriana Montoya, destacando que hasta el momento no hay restricciones o regulaciones en las compras.
Cuando aparecen los síntomas…
Esta tolimense residente en Italia expone que cuando una persona cree tener los síntomas del COVID-19 lo primero que debe hacer es quedarse automáticamente en cuarentena en su casa. Es decir, no puede salir a ningún lugar, ni siquiera a un hospital y, si hay más personas en el lugar, encerrarse en una habitación sin ningún tipo de contacto.
Lo siguiente es llamar a una línea que el Gobierno Italiano les facilitó, allí comentan la situación y en poco tiempo personal sanitario está en esta casa evaluando el caso. Dependiendo del grado de enfermedad se analiza si necesita hospitalización o se puede seguir gestionando desde el lugar de residencia.
“Hay una sensación apocalíptica”
Para Adriana la problemática no es solo la enfermedad, también es la parte económica, el tema laboral, el encierro y los muchos cuestionamientos y preocupaciones que pasan por su cabeza, como: ¿Hasta cuándo durará? o ¿Qué pasará después? (Ver: Se eleva a nueve el número de personas infectadas con el coronavirus en Colombia)
“En general el ambiente acá es pesado, el solo hecho de ver las calles solas, la sensación es apocalíptica porque hace unos días había gente en la calle, uno sabía que estaba el virus, pero al menos se podía caminar. Ahora siento como mucha tristeza, desolación y más porque no hay una luz de una posibilidad de una cura”, relata con angustia esta ibaguereña.
Por ahora, afirma que tanto ella como su hermana tratan de seguir todas las recomendaciones que les exigen las autoridades sanitarias con la esperanza de que esta pesadilla termine pronto. (Ver: La OMS declara al coronavirus como una pandemia)
Recomendaciones para Colombia
No solo es por lo que se está viviendo en su país de residencia, Adriana Montoya también se encuentra en alerta ante la llegada del coronavirus a Colombia, pues en la capital tolimense vive toda su familia, incluida su hija.
Por ello, aunque recomienda no entrar en pánico, sí pide que se sigan todas las precauciones y recomendaciones dadas por el Gobierno Nacional, ya que esta falta de atención, asegura Montoya, fue lo que llevó a Italia a vivir el masivo contagio con virus.
“Todo el mundo lo tomó de manera tranquila y hubo mucha falta de control, se sabe que llegan demasiados turistas y esa enfermedad inició desde finales del año pasado, tuvieron que estudiar y ponerse en conocimiento del virus. Ahora, se sabe que la población que más afecta es a los adultos mayores y aquí la mayoría son ancianos, el porqué de tantas personas que han muerto”, enfatiza.
Finalmente, confirma que el constante lavado de manos, así como mantener distancia con las personas, sí es esencial en la prevención del contagio del COVID-19. (Ver: Neumólogo del Hospital Federico Lleras entrega recomendaciones para enfrentar el coronavirus)