Vecino hizo cerrar supermercado Mercacentro de la calle 37
Después de un año y seis meses de funcionamiento, la Policía Metropolitana de Ibagué cerró el supermercado Mercacentro ubicado en la calle 37 con carrera Quinta, presuntamente por la presión ejercida por un vecino de ese edificio, identificado como Héctor Gordillo, quien ha expresado su inconformismo por la operación de este establecimiento comercial. (Ver: Mercacentro abrirá supermercado exprés en el centro de Ibagué)
Según los abogados de la cadena Mercacentro, el señor Gordillo ha buscado todo tipo de estrategias jurídicas para cerrar el supermercado y meses atrás advirtió que tenía las “influencias suficientes” para conseguir su objetivo, que se cristalizó este viernes en la tarde, cuando un grupo de agentes de la Policía selló el local por tres días, atendiendo la orden de un Inspector local.
Al parecer, el cierre del establecimiento habría sido por la supuesta violación del uso del suelo y el reglamento de propiedad horizontal del edificio, planteamiento que ha sido debatido por el equipo jurídico de Mercacentro.
“No puede ser posible que ese local comercial haya funcionado como restaurante (Lima Broaster) y farmacia (Copifam), y ahora es malo porque funciona un supermercado”, expresó un vocero de la cadena. (Ver: "Con este Mercacentro generaremos 15 empleos": Carlos Alvarado)
Un concepto de la Alcaldía de Ibagué, y que presentaron los policías en el momento del cierre del local, indica que Mercacentro “requiere de licencia de adecuación al cambio de uso ya que en los planos del reglamento de propiedad horizontal aparece como Restaurante Lima Broaster”. Ese, precisamente, fue el argumento del vecino inconforme.
“La norma dice que puede funcionar un establecimiento comercial y eso somos. Consideramos que la Policía actuó precipitadamente, porque debió agotarse el debido proceso. Debieron permitirnos la defensa en un proceso administrativo y, seguramente, habríamos podido resolver todo en el marco de la ley, no con cierres y amenazas de un particular”, expresó el vocero de Mercacentro.
El procedimiento policial generó zozobra entre los 22 empleados del supermercado que laboran en este local, el único que tiene una operación de 24 horas.
EL OLFATO intentó comunicarse con el Héctor Gordillo, pero no respondió las llamadas que se le hicieron a su teléfono celular.