Su celular puede ser la puerta directa para caer en estafas

Teniendo en cuenta que la aplicación de mensajería instantánea se volvió una parte fundamental en la cotidianidad de las personas, los delincuentes aprovechan para hacer de las suyas.

Una modalidad es fingir ser parte del equipo de soporte técnico de WhatsApp, incluso le anuncian al usuario que perderán la cuenta si no se introduce un código. 

Así le ocurrió recientemente a un joven de Ibagué, según su relato a través del número 316 3993126, recibió un mensaje en el que le indicaron que era necesario confirmar la identidad, porque la cuenta “ha sido solicitada en un nuevo dispositivo, si ha sido usted quien realizó el cambio de dispositivo, responda SI, por el contrario, responda NO”.

Seguidamente, le indicaron introducir un código de verificación de seis dígitos; si no lo hacía, procederían a bloquear el teléfono y la línea.

EL OLFATO habló con el intendente Germán Rodríguez, responsable de Prevención Gaula de la Policía del Tolima quien explicó que cuando la persona escucha que puede quedarse sin su móvil o cuenta de mensajería, sin dudarlo acepta el código o enlace. 

“Una vez entregamos el código, los delincuentes entran a nuestra cuenta y revisan las conversaciones que nosotros tenemos, por eso la invitación es a verificar y corroborar la información”, dijo Rodríguez. 

El paso siguiente de los ladrones es empezar a solicitar dinero a los amigos y familia a nombre de la víctima, aduciendo que está pasando por problemas económicos.  

En lo relacionado con las estafas, lamentablemente la gente también sigue cayendo en la modalidad conocida como ‘tío - tío’ que consiste en que una persona, de forma convincente, se hace pasar por familiar y pide dinero para salir de un problema con las autoridades. 

“Cuando ese tipo de situaciones se nos presentan, lo primero que debemos hacer es cortar la conexión a la extorsión, porque muchas veces nos quedamos escuchando y cuando menos nos damos cuenta estamos haciendo la consignación a los delincuentes”, dijo el intendente.     

La debilidad de las redes sociales

Asimismo, explicó que sin esfuerzo los ciberdelincuentes obtienen la información a través de las redes sociales, pues desde la pandemia las personas se acostumbraron a publicar todos sus desplazamientos e información familiar.

“Los delincuentes encontraron (a través) de internet ese insumo para muchas de las extorsiones que se nos presentan”, explicó el integrante del Gaula. 

Añadió que esta información es guardada en una especie de bitácora por los ladrones, “en los diferentes allanamientos que realizamos en la cárcel, no solamente encontramos SIM card, teléfonos o módem, sino también cuadernos en donde el delincuente hacen algo que se llama ingeniería social”, es decir, tomar apuntes de los datos que publica su víctima.  

Otra de las fallas recurrentes es publicar fotos de viajes o paseos familiares, pues se da la alerta de que la vivienda quedará sola, “la invitación es ser muy cuidadoso con los que publicamos en redes sociales”, comentó Rodríguez. 

Fijese a quien le acepta la solicitud de amistad 

En el tema de estafas, el género masculino suele ser una población que se engaña continuamente a través de imágenes. 

Por ejemplo, “aparece una chica hermosa, semidesnuda en la foto de perfil y le aceptamos la solicitud de amistad”, explicó el intendente. 

Una vez se entra en contacto y confianza, se convence a la víctima de enviar fotos íntimas, permitiendo que se inicie la extorsión.

“Para el delincuente si usted consigna una vez, consigna dos y las veces que sea, por eso la invitación es a comunicarse con nosotros a la línea de emergencia 165 durante las 24 horas del día”, enfatizó Rodríguez. 

En la lista de modalidades está el conocido como falso servicio, que consiste en citar personas dedicadas a hacer acarreos, viajes express o prestar servicios de funerarias o ambulancias en zona rural. 

Una vez están en un lugar en el que no hay señal de móvil, llaman a la familia solicitando dinero argumentando que su ser querido está secuestrado. 

Origen carcelario 

Sobre las diferentes modalidades de estafa y extorsión, el miembro del Gaula indicó que se tiene identificado que más del 90% de las llamadas provienen de los centros penitenciarios y carcelarios de Valledupar, Boyacá, La Dorada y Bogotá. 

En lo que respecta a Ibagué, el intendente señaló que gracias al trabajo coordinado con el Inpec se adelantan allanamientos que “nos ha permitido que desde la cárcel de Picaleña, todo se encuentre controlado en lo que tiene que ver con llamadas extorsivas”, concluyó.