Abren investigación contra alcaldesa de Ibagué por uso indebido del Panóptico
La alcaldesa de Ibagué, Johana Aranda, será procesada por una fiscalía de la unidad de delitos contra la Administración Pública por el presunto delito de peculado por uso, tras utilizar el Museo Panóptico de la ciudad como restaurante y ofrecerles un almuerzo a varios líderes nacionales y regionales del Centro Democrático, entre ellos a la senadora Paloma Valencia.
La mandataria convocó a sus aliados del uribismo para sostener una reunión informal, pero el encuentro no lo realizó ni en su despacho ni en ningún restaurante de la ciudad. Aranda escogió el centro del edificio cruciforme, declarado como Monumento Nacional en 1998, a través de la Resolución 752 del 30 de julio de ese año.
Allí, instalaron una mesa, la decoraron con flores amarillas y sirvieron el almuerzo, acompañado por una sangría, una bebida alcohólica de origen español y hecha a base de vino tinto.
En la punta de la mesa estaba sonriente la alcaldesa Johana Aranda mientras brindaba con la senadora Paloma Valencia, a su derecha, y la concejal Silvia Ortiz, a su izquierda. Los otros comensales fueron: el diputado Felipe Ferro, Holman Guevara y Luis Evelio Herrera, los dos últimos muy cercanos a la congresista Valencia.
Del almuerzo quedaron varios registros fotográficos que ya están en poder las autoridades. En las imágenes se observa la participación activa de Diana Londoño, directora del Complejo Cultural Panóptico de Ibagué, investigada por entregarle más de $700 millones en contratos a una fundación de su familia cuando se desempeñó como secretaria de Cultura Municipal, en la administración del exalcalde Andrés Hurtado. (Ver: El yo con yo de la Secretaria de Cultura de Ibagué: contrató con una fundación de su familia más de $700 millones)
Las funcionarias habrían violado el artículo 398 del Código Penal. La norma indica lo siguiente sobre el delito de peculado por uso: “El servidor público que indebidamente use o permita que otro use bienes del Estado o de empresas o instituciones en que éste tenga parte, o bienes de particulares cuya administración, tenencia o custodia se le haya confiado por razón o con ocasión de sus funciones, incurrirá en prisión de dieciséis (16) a setenta y dos (72) meses e inhabilitación para el ejercicio de derechos y funciones públicas por el mismo término”.
La alcaldesa y la directora del Panóptico no solo pasaron por alto este artículo del Código Penal sino que tampoco acataron el Decreto 1080 de 2015, en el que el Gobierno Nacional agrupó las normas del sector cultural y estableció instrucciones puntuales para la efectiva la preservación de los Museos del país.
En estas recomendaciones está precisamente la prohibición del consumo de alimentos y bebidas.
Además, en la misma página web del Museo Panóptico de Ibagué, se lee claramente: “Dentro del edificio cruciforme, auditorio y sala del cuerpo, evita consumir bebidas y/o comidas”. (Ver: Recomendaciones del Panóptico de Ibagué)
Sin embargo, como ya parece costumbre en el hurtadismo, los bienes del Estado son usados reiteradamente de manera indebida por sus líderes.
Precisamente, el exalcalde Andrés Hurtado afronta un nuevo juicio penal por el mismo delito, toda vez que en marzo del año 2021, utilizó el Estadio Manuel Murillo Toro para realizarle la fiesta de cumpleaños a su hijo menor. Hurtado está siendo procesado junto al exgerente del Imdri Alejandro Ortiz. (Ver: Comienza la dilación del proceso por el uso indebido del Estadio Murillo Toro, tal y como ocurrió con los piques ilegales)