Los negocios de más de $4.000 millones entre Johana Aranda y familiares de un concejal de Ibagué

Esta semana la alcaldesa de Ibagué, Johana Aranda, salió por todos los medios de comunicación invocando la solidaridad de la ciudadanía para apoyar a los microempresarios afectados por el devastador incendio estructural que acabó casi con una cuadra de la calle 19, entre carreras Cuarta y Quinta.

Hasta montó una feria para reunir dinero del público y poder financiar -con recursos de terceros- a los comerciantes afectados por las llamas.

Y mientras descargaba en los particulares la atención inmediata de los damnificados, su gobierno seguía destinando los recursos oficiales para llenar los bolsillos de una poderosa familia ibaguereña, muy cercana al concejal de Ibagué, César Franco, perteneciente al partido Cambio Radical y uno de los principales aliados políticos de la mandataria. 

Justo durante la semana de la trágica conflagración, la alcaldesa Aranda le entregó un contrato, a dedo, por $763 millones, a la firma Servicios Empresariales SYK, perteneciente a la familia integrada por Ernesto Alfonso Quiroga y Karina del Pilar Aguilera Franco, prima hermana de César Franco y promotora activa de sus campañas políticas. 

Servicios Empresariales SYK será la encargada, por primera vez en su historia comercial, de realizar la adecuación, remodelación y mantenimiento de los espacios físicos de una entidad oficial como la Alcaldía de Ibagué.

Como experiencia en este tipo de actividades aportó un contrato de mantenimiento de la fachada del Centro Comercial Acqua, propiedad de la familia del concejal César Franco. 

Este es uno de los siete contratos que ha recibido esta empresa en los ocho meses de la administración de Johana Aranda y que, sumados, equivalen al no despreciable monto de: $4.044.731.114.

Durante el gobierno de Andrés Hurtado esta compañía no recibió contratos ni de aseo ni de mantenimientos locativos. Tampoco de suministro de alimentación para las mascotas del CAPA. 

La polifacética empresa de la prima del concejal Franco

Para que una pequeña empresa familiar lograra sumar -en tan corto tiempo- este jugoso botín del presupuesto del Municipio tuvo, al parecer, dos características: que su objeto social se diversificó para acaparar múltiples negocios y, por supuesto, las excelentes relaciones políticas del concejal oficialista con la alcaldesa.

Servicios Empresariales SYK tiene contratos de aseo y cafetería en la Alcaldía de Ibagué, por $2.325.110.100; en el Ibal, por $679.672.991, y en la Gestora urbana, por $42.689.850.

Además, en la Secretaría de Gobierno Municipal fue contratada para la entrega de kits de aseo personal a los detenidos en la Permanente Central, por valor de: $84.500.000, y proveer los alimentos para las mascotas que están en el Centro de Atención y Protección Animal, CAPA, por $73.000.000, como lo reveló EL OLFATO el pasado 11 de agosto. 

Sobre este último proceso, Servicios Empresariales SYK nunca había ejecutado un contrato relacionado con la nutrición de perros y gatos, y en la Cámara de Comercio de Ibagué ni siquiera tiene registrada esta actividad comercial.  

Además, para aparentar que el proceso de contratación fue transparente, la Secretaría de Gobierno presentó dos cotizaciones para establecer los montos de la alimentación de las mascotas.

Una fue Servicios Empresariales SYK y la otra Francol LTDA, coincidencialmente también dedicada a la prestación de servicios de aseo.

Francol LTDA es propiedad de la señora Mariela Franco Delgado, tía del concejal César Franco, madre de Karina Aguilera y suegra de Ernesto Quiroga, representante legal de Servicios Empresariales SYK. Es decir: un negocio redondo y familiar. 

Doña Mariela creó su empresa a través de la escritura pública 0072, del 19 de diciembre del año 2008, como aparece en los archivos de la Cámara de Comercio de Ibagué y en la Notaría Séptima. 

Estos hechos están siendo investigados por una fiscalía de la unidad de delitos contra la Administración Pública, aunque poco o nada se puede esperar de este proceso, ya que, después del escándalo de los Juegos Deportivos Nacionales de 2015, pareciera que la corrupción administrativa en la ciudad desapareció. 

Desde ese entonces, el ente investigador no ha entregado ningún resultado relevante y la ciudadanía cada vez confía menos en esta institución. 

Información contractual oculta

En la investigación adelantada por EL OLFATO se encontró que varios de los contratos celebrados entre la Alcaldía de Ibagué y Servicios Empresariales SYK no aparecen cargados en la plataforma de contratación estatal Secop II.

Por ejemplo, no hay rastro de documentos importantes como las actas de inicio, los soportes de legalización ni mucho menos los informes de ejecución.

Estas irregularidades deberían ser investigadas por la Procuraduría Provincial de Ibagué, pero esta entidad tampoco pareciera existir en la capital del Tolima. 

Su silencio es evidente, los resultados pobres y los controles poco visibles. Gracias a eso, Ibagué retrocede cada día más y dos o tres familias, en cada gobierno, cambian de casas, de carros y sus cuentas bancarias se robustecen rápidamente. 

Para hablar de estos hechos, EL OLFATO contactó al nuevo director de la Oficina de Contratación de la Alcaldía de Ibagué, Alejandro Giraldo, pero no fue posible que aceptara una entrevista. 

Concejal Franco guardó silencio

Tres fuentes de la Alcaldía de Ibagué, que por obvias razones pidieron mantener sus nombres bajo reserva, sostienen que los $4.000 millones que ha recibido Servicios Empresariales SYK serían la contraprestación que le entrega Johana Aranda al concejal César Franco, uno de los políticos locales que mayor respaldo electoral aportó en las elecciones de octubre del año pasado. 

Por esa razón, buscamos al concejal Franco, quien aseguró que, por razones de su agenda, le era imposible atender una entrevista. 
Sin embargo, a través de su línea de WhatsApp, negó que su familia tuviera contratos con la administración de Aranda y su esposo Juan Arturo Gutiérrez, quien sería el jefe de contratación de Ibagué en la sombra. 

"Que yo sepa, mi familia no tiene contratos con la Alcaldía", aseguró Franco.

Luego, cuando se le enviaron imágenes suyas con su prima hermana Karina, afirmó: "Que yo sepa, ella tampoco tiene contratos. Eso debe consultarlo con la Alcaldía, que es la que maneja esos temas".

En esto tiene razón parcialmente el cabildante. Su prima no firma los contratos, pero su nombre sí aparece en múltiples documentos de constitución de la empresa ante la Cámara de Comercio de Ibagué. 

Karina Aguilera Franco es socia fundadora y, en varias actas, aparece también secretaria y su marido Ernesto Alfonso Quiroga Uribe como presidente. 

Esta redacción también intentó dialogar con el representante legal de Servicios Empresariales SYK, Ernesto Quiroga, sobre el éxito comercial logrado en el gobierno de Juan Arturo Gutiérrez y Johana Aranda, pero tampoco fue posible. En su línea de WhatsApp se le dejó un mensaje y no contestó.