La obra del Coliseo Mayor de Ibagué tiene un nuevo inconveniente que retrasaría su entrega
El positivismo del alcalde Andrés Fabián Hurtado a través de las redes sociales sobre el avance de las obras del Coliseo Mayor de Ibagué, no concuerda con la realidad que expone el contratista a cargo del proyecto.
El mandatario informa que están en la instalación de barandas, de puertas al interior del escenario y que adelantan las labores de urbanismo y enchapes, pero en realidad se está buscando una ampliación de plazo por falta de un material indispensable para culminar la cubierta del escenario deportivo.
Se trata de la membrana o manto que ayuda a impermeabilizar el techo del Coliseo y cuya fabricación se toma al menos unos cuatro meses, lo que no permitiría cumplir con los tiempos establecidos en el contrato actual.
Según explicó el representante legal suplente de la obra, el ingeniero Didier Portela, tuvieron que esperar a que se concretara la adición de los $20.000 millones al valor inicial ($43.000 millones) para comprar la materia prima en Francia y trasladarla a Perú, donde se realiza su fabricación.
“En este momento ya están en el corte y tejido de la membrana en Perú, porque ellos ya adelantaron la topografía para iniciar la elaboración”, dijo Portela.
“Lo difícil es la importación. Esta es una ruta crítica porque, una vez terminen de fabricarla, hay que importarla y traerla al puerto de Buenaventura, luego organizar la traída a Ibagué y finalmente instalarla”, agregó.
Por esta razón, tuvieron que solicitar a la Administración Municipal que adicione al menos unos tres meses más para hacer entrega oficial de la obra.
“Hemos avanzado en todo lo demás, si no fuera por la membrana podríamos cumplir porque ya se está culminando todo lo que tiene que ver con concretos, urbanismos, puertas, mampostería, duchas, camerinos, entre otros”, afirmó el ingeniero.
Los tropiezos
La construcción del Coliseo Mayor ha tenido varios tropiezos en el camino. Inicialmente, la Procuraduría ordenó la suspensión de la adjudicación del contrato por investigaciones.
Una vez se logró superar esta situación, en febrero del año 2020 fue puesta la primera piedra que inauguró la obra, pero no se avanzó en nada y estuvo todo quieto durante cuatro meses.
Posteriormente, debido a la falta de recursos para continuar con la construcción del escenario, se tuvo que detener nuevamente la construcción para mayo del año 2022.
En ese momento se conoció que el valor del acero aumentó de precio y para ello tuvieron que aumentar los $20.000 millones al valor inicial.
Dentro de este valor, también quedó incluido el costo de la fabricación e importación de la membrana, que a la fecha es la que ocasiona el nuevo retraso a la culminación del Coliseo Mayor.