Tercera empresa de transporte público que suspende contratos a conductores en medio de la emergencia sanitaria en Ibagué
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En medio de la crisis económica por la pandemia del coronavirus, las empresas de transporte público de Ibagué continúan tomando decisiones para recortar los gastos. Una de estas medidas es la de suspender los contratos a los trabajadores como lo hizo este miércoles 15 de abril la empresa Logalarza.
La gerente de la firma, María Helena Espitia, confirmó la suspensión temporal de los contratos de los 188 conductores que laboran en la empresa. Es decir, no devengarán salario hasta tanto no se levante la medida de aislamiento.
La decisión fue comunicada a través de una misiva en la cual se advierte que no fue posible adoptar alguna de las medidas establecidas por el Ministerio de Trabajo, pues la labor del conductor no es compatible con el teletrabajo y por esta misma razón no se puede continuar con el pago de los salarios. (Ver: Expreso Ibagué suspende contratos a más de 270 conductores de transporte público en medio de la pandemia)
De igual manera, precisaron que el 17 de marzo se envió a vacaciones colectivas acumuladas y anticipadas a los 187 conductores, destinando la suma de $169.118.194. No obstante, debido a la extensión del aislamiento no pudieron continuar sosteniendo la nómina.
Ante esto, la directiva de la empresa aseguró que se continuará con el pago de la seguridad social y pensión de los trabajadores, pero sin el salario.
Por su parte, Jefferson Cruz Alonso, propietario de busetas adscritas a Logalarza, indicó que las directivas se negaron a hacer uso de los dineros del fondo que mensualmente se alimenta de la operación de la flota para sortear esta crisis.
"Por ser sociedad anónima ella es autónoma para hacer lo que le provoque. Además de ser la gerente es dueña del 100 % de las acciones junto con sus familiares. Los propietarios somos unos simples afiliados que no tenemos voz ni voto y tenemos que llevarles dinero a estas empresas o de lo contrario nuestras busetas no trabajan", cuestionó Cruz.
Las empresas Expreso Ibagué y Cotrautol fueron las primeras en tomar esta medida que afecta a cerca de 776 conductores, los cuales no tendrán el sustento para alimentar a sus familias en medio de la pandemia.
