Nueva película de la cineasta indígena Angélica Alape exhibirá una cruel realidad del Tolima
Angélica Alape Roa es una joven indígena de la comunidad Pijao perteneciente al municipio de Coyaima, y desde muy niña tuvo que trasladarse a Ibagué por las balas del conflicto armado.
En la capital hizo una vida, estudió periodismo en la Universidad del Tolima y la producción audiovisual la inclinó por el cine, arte que le ha dado grandes felicidades.
La última alegría fue saberse ganadora de un estímulo de parte de la Alcaldía de Ibagué, para llevar a cabo una película que tiene como escenario principal la capital del Tolima, en el marco de un festival folclórico, y que lleva por nombre "Dos Orillas".
La idea del largometraje, que comenzará su rodaje en septiembre, nació dos años atrás. Angélica quería escribir un guion en el cual se viera reflejado el terror y la violencia en la que viven las poblaciones indígenas, y cómo estas circunstancias empujan a las víctimas a ejecutar actos inimaginables.
“Los indígenas vivimos discriminados, quieren apoderarse de nuestras tierras, es un hecho histórico, y estar desplazado en la ciudad es una situación muy dura; entonces lo que quise fue contar la historia de un joven indígena a quien le matan a algunos de sus familiares, y él llega a la ciudad para llevar a cabo una serie de homicidios”, manifestó Angélica.
El protagonista de esta película es Timote, un joven que se ha propuesto liberar las almas de sus familiares persiguiendo a aquellos que no hicieron nada para impedir las atroces muertes de sus allegados. Las escenas se dan en el marco de una fiesta popular, mientras unos periodistas se dan a la tarea de averiguar qué hay detrás de tan horribles decesos.
“Mientras las fiestas continúan, los asesinatos son ocultados para que estas no se cancelen. Sin embargo, Daniela, Santiago y Camilo, tres reporteros, comienzan a investigar más a fondo los vínculos que tienen los asesinados con varias ilustres personalidades de la ciudad, vinculadas al paramilitarismo, y la relación de éstos con la masacre de una comunidad indígena al sur del Tolima”, sintetizó Angélica.
Siguiendo las pistas de las muertes, los periodistas se sumergen en un submundo de silencio y ritualismo mágico comandado por Timote, cuyo desenlace promete dejar los espectadores de la película en un estado de asombro y reflexión.
“El rodaje va a ser muy bonito, porque vamos a recrear comparsas, los bailes y las músicas del festival, estaremos en algunas plazas y barrios”, puntualizó Angélica, quien asegura que la película podría estar ensamblada para finales de noviembre, con el fin de ser exhibida, si no hay contratiempos, en diciembre.
Angélica Alape Roa ha participado en varios productos audiovisuales en distintos cargos. Su primera película documental como directora, investigadora y guionista, fue Margures Managrande, un relato de mujeres de la etnia y territorio de Coya Managrande.