Las dudas sobre las presuntas amenazas hacia la alcaldesa Johana Aranda

La revelación de un supuesto plan para atentar contra la vida de la alcaldesa de Ibagué, Johana Aranda, causó sorpresa no solo entre la ciudadanía sino también en los organismos de inteligencia estatales. (Ver: "A mí me quieren quitar la vida": Johana Aranda denuncia amenazas de muerte)

La mandataria apareció el pasado sábado, en el Coliseo Mayor del Parque Deportivo, durante la inauguración de unas competencias juveniles, con un pesado chaleco antibalas.

Allí afirmó de manera escueta que existirán amenazas en su contra: “No permitan que nadie les robe sus sueños. Hay muchos que quieren robarnos los sueños. A mí me quieren quitar hasta la vida”, dijo. 

La noticia generó de inmediato desconcierto, pues la mandataria no ha tenido -por ejemplo- posturas radicales frente a la actuación de grupos criminales organizados ni su administración ha combatido las bandas delictivas locales.

Por el contrario, Aranda ha sostenido que Ibagué es una ciudad por donde la gente “puede caminar tranquila”. (Ver: “En Ibagué ya podemos caminar tranquilos”: Aranda sobre la seguridad)

Organismos de inteligencia desconocen las amenazas

EL OLFATO consultó durante el fin de semana a sus fuentes en diferentes organismos de inteligencia, no solo en Ibagué sino también en Bogotá, y ninguna entidad tiene reportes sobre un presunto atentado contra la alcaldesa Johana Aranda.

Esta redacción también le preguntó a la funcionaria sobre su aparición con chaleco antibalas y esto contestó: “No puedo hablar del tema, todo lo tiene la Unidad Nacional de Protección (UNP)”.

Las preguntas que quedan en el aire

La respuesta de la alcaldesa Aranda y la manera en la que se hizo pública la noticia dejan muchas preguntas en el aire.

Primero, no es muy usual que estos asuntos tan delicados los desconozcan los organismos de inteligencia estatales y que pasen directamente a la Unidad Nacional de Protección.

Segundo, es extraño que la alcaldesa de Ibagué y su equipo de comunicaciones no hubieran hecho una rueda de prensa para socializar un hecho tan grave sino que lo lanzaron de manera “casual” en un recinto repleto de jóvenes deportistas.

Normalmente, en esta administración, hacen hasta tres o más ruedas de prensa por semana y publican decenas de videos en las redes sociales institucionales.

Un tercer elemento llamativo es el uso del chaleco antibalas, pero su esquema de protección no se incrementó.

“Si existiera un plan criminal, lo primero que se recomienda es suspender la agenda pública y reforzar su esquema de protección, pero aquí no pasó ni lo uno ni lo otro”, dijo una de las fuentes de un organismo de inteligencia en Bogotá.

Esta es la primera vez que un alcalde de Ibagué denuncia amenazas de muerte durante su mandato en la historia reciente de la ciudad.