La calle 103 se convirtió en una de las intersecciones con mayor accidentalidad de Ibagué
La intersección vial de la calle 103 con carrera Quinta, en el norte de la ciudad, se ha convertido en una zona de alta accidentalidad, pues en el lugar no existe señalización, y tampoco un semáforo que controle el alto flujo vehicular que se presenta en esta calle, sobre todo en las horas pico.
Varios habitantes de los barrios aledaños, como el Topacio, Villa Marina y Jardín, denunciaron que han presenciado varios accidentes en este cruce, justo el día de la apertura de la calle ocurrió un accidente.
“La 103 con carrera Quinta se convirtió en el punto número uno de accidentalidad de esta bella comarca. Lamentablemente, no se han tenido en cuenta algunas cosas, por ejemplo, señalización, la colocación de algunos reductores de velocidad. El día que abrieron la 103, salía una motocicleta hacia la Quinta y entraba un taxi de la Quinta a la 103 y se estrellaron de frente”, manifestó Marcelino Cortázar, habitante del sector.
El 25 de septiembre, la Alcaldía de Ibagué a través de su oficina de prensa, anunció como una gran noticia la pavimentación de 2.500 metros cuadrados para la conexión vial de la calle 103, este tramo busca conectar a la avenida Ambalá con la avenida Mirolindo, pero no tuvieron en cuenta que a esta calle le faltan aspectos mínimos de señalización para empezar a funcionar.
Otros residentes del sector, explicaron que es necesario la instalación de una red semafórica en esta intersección, porque no son solamente los vehículos los que corren peligro, sino también los peatones que transitan por aquí.
“Hace mucha falta un semáforo acá porque es un peligro, los carros pasan muy rápido y uno va con niños para el colegio y aquí ha habido mucho accidente, sobre todo en este lado del lado de la Plaza del Jardín”, expresó Johana Hernández.
Por su parte, Carlos Aroca, agregó que el alto flujo vehicular de la zona dificulta el paso de los vehículos que quieren tomar o salir de la carrera Quinta.
“Acá en esta intersección hace falta un semáforo. Tanto los carros que vienen de la Ambalá, como los que vienen de El Salado, o los que van bajando para El Topacio sufren para cruzar. Yo transito en moto y es muy difícil atravesar la carrera Quinta”, expresó el ciudadano.
EL OLFATO consultó al secretario de Movilidad, Ricardo Rodríguez, quien manifestó que la zona aún se encuentra en estudios, por ello no se puede definir aún qué estrategia se realizará en esta zona para evitar el aumento en la accidentalidad.
“Estamos viendo que la desembocadura de la 103 sobre la carrera Quinta está presentando dificultad a los actores viales, podemos estar analizando cada una de las circunstancias sobre ese punto semafórico para tomar la mejor decisión, ante todo protegiendo la vida y la seguridad de los de los actores viales.”, manifestó el funcionario.