Joven ibaguereño con síndrome de Down es la estrella del servicio al cliente
Uno de los retos más grandes de Andrés Cardozo, un joven de 29 años que fue diagnosticado con síndrome de down, es trabajar por sus sueños y sobrepasar cualquier limitación que se presente en su camino.
Desde 2021, Cardozo trabaja en la empresa de llantas y lubricantes SuCampo Sullanta y sueña con tener su propia empresa.
Sullanta es una organización que cuenta con un compromiso social de inclusión y equidad donde dan oportunidad a las personas que cuentan con capacidades diversas.
"Yo entré a la empresa gracias al programa Inclusión laboral: manos capacitadas a la obra", aseguró Andrés.
Como expresó Maicol Estiven Bermúdez, compañero de trabajo de Cardozo, el joven es amigable, responsable, puntual y perfeccionista en sus labores.
"También como compañero es muy solidario, siempre está muy pendiente de lo que toca hacer, y brinda la mejor atención al cliente. Lo que más me gusta es su manera de ser, porque siempre está activo, y pendiente de lo que se necesita en el momento y con cumplir los objetivos del día", comentó Bermúdez.
Estas características han destacado su desempeño en Sullanta. Pero además este joven trabajador tiene su propio emprendimiento y busca convertirlo en empresa.
Uno de los requisitos para graduarse del programa técnico de sistemas en el SENA, era que Andrés creará su emprendimiento y de ahí surgió Margarito Accesorios, un negocio que le ha permitido empezar a trabajar por su sueño: vender los productos de su propia empresa.
En su tienda de Instagram, Cardozo ha puesto a prueba sus habilidades para las ventas. Allí le ofrece al público accesorios de mujer.
"A él le gusta mucho vender. Por eso él dice que cuando termine de trabajar en la empresa, él quiere tener su propia empresa. Por eso, tuvimos la idea de irle comprando accesorios para que él venda. Los ofrece y ya ha vendido en varias partes", comentó la madre del joven, María Cristina Corrales.
El dinero que recibe lo guarda en su cuenta de ahorros para invertirlo en la creación de su propia empresa.
Su pilar
A sus 29 años, ha vivido acompañado de su familia, compuesta por su mamá, papá, hermana y sobrino, quienes lo han apoyado desde su nacimiento.
"Él empezó estudiando en un colegio privado desde segundo grado. Tuvimos la fortuna de que estaba el profesor Orlando, hizo toda la primaria y todo el bachillerato. Tuvo unos profesores y compañeros excelentes que lo apoyaron en todo", comentó Corrales.
En el 2016, obtuvo uno de los logros más importantes de su vida, se graduó del colegio y para celebrar su familia le hizo una fiesta.
Para Andrés, la familia, especialmente la unión familiar, es muy importante. En fechas especiales, él sueña que quienes lo rodean estén unidos pasando lindos momentos.
"Por ejemplo, en diciembre, en la cuadra, él procuraba que la gente estuviera unida y que hicieran lo que se hacía antiguamente: hacer sancochos o caldos los siete de diciembre. Pero, no se ha logrado", dijo la mamá.
Del mismo modo, este deseo de unidad y transformación lo refleja en el amor que siente por su departamento y ciudad, debido a que es un joven que se angustia por el estado de las calles y el cuidado que se les da.
"Vive muy preocupado porque las calles de Ibagué están mugrosas. Él decía que estaban llenas de huecos y que quería ser candidato porque desea limpiar las calles de la ciudad", recordó la madre.
En su afán por cambiar la situación de las vías de Ibagué, a cada hueco que encontraba le tomaba foto y se la compartía a un periodista.
Así como se preocupa por la malla vial de la capital, él es un ferviente fanático del equipo de fútbol de la región.
"Soy un hincha fiel del Deportes Tolima y me gusta ir al estadio siempre. También, disfruto de los platos típicos: el tamal y la lechona", explicó.
Cardozo es un joven que trabaja día a día por sus sueños, mientras disfruta de sus aficiones, de sus amores y de su familia, mientras que impacta a la ciudadanía con su labor y su deseo de aportar a la mejora de la ciudad.