Hurtado tuvo que suspender polémica licitación del Coliseo Mayor por cuestionamientos del Gobierno y la Procuraduría
El alcalde de Ibagué, Andrés Hurtado, no tuvo otro camino que suspender la cuestionada licitación para la construcción del Coliseo Mayor del Parque Deportivo, obra en la que pretenden invertir $43.917 millones.
La decisión la adoptó luego de recibir duros cuestionamientos del Ministerio del Deporte (aportante de los recursos) y de la Procuraduría General de la Nación, entidades que analizaron cuidadosamente la denuncia hecha el pasado fin de semana por EL OLFATO y que dejó al descubierto graves irregularidades que favorecerían al único proponente del proceso: la Unión Temporal Ágorasport -integrada por una empresa española y una discreta empresa del Putumayo-. (Licitación del Coliseo Mayor, por $43.917 millones, sería un vergonzoso ‘chaleco’)
De acuerdo con la publicación, el pliego de condiciones tiene preocupantes similitudes a las detectadas por la Fiscalía en el desfalco de los Juegos Deportivos Nacionales de 2015, cuando el exasesor Orlando Arciniegas amarró los requisitos de modo que solo los pudiera cumplir el único oferente. Lo que comúnmente se conoce como un contrato chaleco.
Después de la revelación hecha por este medio, la Procuraduría realizó una inspección en la sede del Imdri, ayer (martes), y la información fue trasladada a Bogotá.
Luego, el Gobierno Nacional y la Procuraduría pidieron explicaciones a la administración del alcalde Andrés Hurtado, quien le pidió al gerente encargado del Instituto, Carlos Portela, que se “abstenga” de adjudicar el contrato.
Ante requerimientos de @PGN_COL, alcalde de #Ibagué (@Andreshurtado_7) pidió a @imdribague abstenerse de continuar con la adjudicación del contrato para construir y adecuar el Coliseo Mayor de la ciudad, por más de $43.917 millones, hasta resolver observaciones. pic.twitter.com/Uu0q4FCaCl
— Procuraduría Colombia (@PGN_COL) April 30, 2020
“Hay varias observaciones por parte de los oferentes. Una de ellas: pedían un anticipo del 50 % y en la licitación pública quedó del 15 %. Dado que hemos establecido un convenio con el Ministerio del Deporte con un primer giro por ese porcentaje y el cual se asumió como anticipo para el contratista que resulte favorecido en este proyecto”, señaló Hurtado en un comunicado.
Otro hecho sospechoso fue el requisito del endeudamiento del contratista. Mientras muchas empresas del sector de la construcción tienen un índice de endeudamiento del 75 %, el Imdri lo fijó en el 40 %.
Hurtado defendió ese punto con el mismo argumento que sostuvo hace cinco años el condenado Orlando Arciniegas. Supuestamente, lo que se busca es contratar a unas empresas sólidas financieramente.
“En esta importante obra se requiere 'músculo financiero' para poder realizar la obra y el oferente debe tener la suficiente financiación para adelantar esto”, expresó Hurtado.
Lo que los órganos de control observan con sospecha es que ese requisito del índice de endeudamiento tan bajo terminó limitando la participación de oferentes, tal y como lo hizo Arciniegas con los contratos de los fallidos Juegos Deportivos Nacionales.