Habitantes de la Arboleda Campestre llevan sietes años esperando el megacolegio
Miembros del consejo directivo y padres de familia de la Institución Educativa José Joaquin Florez Hernández, sede Arboleda Campestre, denunciaron que llevan siete años esperando la entrega del megacolegio.
De acuerdo con Ever Contreras, líder y miembro del comité directivo de la institución educativa, la comunidad ha perdido la cuenta de las fechas proporcionadas por la Secretaría de Educación sobre la finalización de la obra.
Aunque esta ya comenzó, no creen que sea posible la entrega para el mes de octubre del presente año porque no cumple con los requisitos como la contratación de docentes de planta y la dotación inmobiliaria.
“Es una responsabilidad del municipio, la ETC, y adicionalmente, todos los requerimientos que se necesitan, como el personal de recurso humano. La Secretaría de Educación sabe perfectamente de qué estamos hablando, cómo son los coordinadores, los docentes, pero docentes de transición, preescolar y primaria; docentes en propiedad”, aseguró Contreras.
Asimismo, los padres de familia en cabeza de su líder han realizado visitas de inspección en el área, obteniendo como respuesta de las Entidades Territoriales Certificadas (ETC) que la obra, al 26 de junio del 2024, se encontraba en un 75,2% de construcción.
“En la parte de abajo, todo ese bloque está en obra negra. Falta el techado, falta la pintura, falta el enchape, y adicionalmente, por la parte de atrás de la institución educativa, que tiene que construir la cancha, nosotros no vemos ni siquiera un metro de asfalto todavía fundido”, resaltó.
Tras no poder reunirse con la secretaria de Educación, María Isabel Peña, el colectivo de padres se siente angustiado, expresando que los más afectados por esta situación son los estudiantes, quienes tienen que trasladarse a diferentes sedes lejanas y rurales.
Además, los alumnos no cuentan con subsidio para rutas escolares, teniendo que costearlas sus familias.
El líder comunitario pidió que las entidades correspondientes se hagan presentes ante los requerimientos para que la obra sea entregada lo más pronto posible.
“Históricamente se ha estado en deuda con la educación de los niños. Lamentablemente, tenemos que decir, como comunidad educativa, que muy posiblemente el FI no entregará estas obras y los niños de nuestra comunidad no podrán iniciar el calendario escolar del año 2025”, concluyó el miembro del consejo directivo.