Expreso Ibagué suspende contratos a más de 270 conductores de transporte público en medio de la pandemia

En una decisión unilateral la empresa Expreso Ibagué informó a sus 277 conductores la suspensión de los contratos de trabajo en medio de la emergencia social y económica generada por el coronavirus. (Ver documento)

A través de una circular, el gerente Hernán Quiñones, resolvió suspender los contratos a los 100 conductores que están activos al igual que a los 177 que se encuentran en periodo de vacaciones. La decisión, se tomó el pasado 4 de abril y fue comunicada a través de una circular a los conductores.  

"En reunión del Consejo de Administración de la Cooperativa, debió adoptarse la forzosa decisión de suspender los  contratos de trabajo de todos los  trabajadores de la Cooperativa, por el tiempo que dure la  emergencia social, económica y sanitaria en el territorio nacional y se ordene el levantamiento de las medidas que impiden la prestación del servicio de transporte público colectivo urbano", señala la misiva.

La decisión se toma debido a que la empresa no cuenta con los recursos presupuestales necesarios, para cumplir con las obligaciones contractuales con los trabajadores.

EL OLFATO dialogó con el gerente de Expresó Ibagué, Hernán Quiñones, quien aseguró que a los trabajadores se les continuará pagando la salud y pensión.

"Esta es una suspensión de los contratos en razón a una fuerza mayor en razón a los actos administrativos que expidió el Gobierno Nacional en cuanto a las medidas de prevención por elñ COVID-19. Es una situación de suspensión, acá no ha habido despidos, ni terminaciones de contratos. Es una suspensión temporal que implica que no se cancela el salario, pero se garantiza la seguridad social y los aportes a pensión de los trabajadores", enfatizó el empresario.

Por su parte, Jefferson Cruz Alonso, propietario de algunos buses de la empresa Logalarza, afirma que la situación es preocupante y se puede replicar en otras firmas.

"La situación se agrava no solamente para los propietarios sino para los mismos conductores. El que hace la resolución es el gerente, pero lo que no cuenta es que nosotros los propietarios tenemos unos fondos ahí, nos meten la mano al bolsillo cada 15 días, ahí hay plata para pagar, pero como ellos se la gastan en otras cosas, en estos momentos están descapitalizados y más Expreso Ibagué que tienen problemas de solvencia financiera", señaló Cruz.

El propietario aseveró que estas familias hoy quedan sin sustento y viviendo de la caridad de sus familiares o personas allegadas.

"Ahora sí queda soportado de que Expreso Ibagué no es viable financieramente. Ellos cogen la plata del propietario y le dan cualquier destino menos para el objeto de la empresa. Esa gente hoy queda sin salario, sin seguridad social y viviendo de la voluntad de la gente. Ahora los propietarios somo los que no podemos descuidarlos. La decisión ya la tomaron y así se van a venir otras empresas. En el caso de Logalarza y de la gerente María Helena Espitia, si le da por tomar esta decisión es solo por necedad, porque los medianos y pequeños propietarios tenemos unos fondos que se pueden utilizar en esta contingencia", concluyó.