Constructora niega haber estafado a propietarios del Alminar Samoa

La firma JF Constructores quiso aclarar algunos de los cuestionamientos hechos al desarrollo del conjunto residencial Alminar Samoa que no cuenta con suministro de agua potable y presenta intermitencia en la prestación del servicio.

Este es asumido por la Junta Administradora del acueducto comunitario El Triunfo, que no contaría con la capacidad, técnica, administrativa y financiera para operar el sistema. (Ver: El drama de 500 familias que compraron apartamento en Ambalá y tienen dificultades para el suministro de agua) 

A través de acciones judiciales, se ha ordenado a la Alcaldía de Ibagué a través del Ibal y del Cuerpo de Bomberos suministrar agua potable a las 620 familias residentes en el conjunto hasta tanto haya una solución definitiva. (Ver: Juez ordena arresto contra Hurtado por no garantizar agua potable a habitantes de Alminar Samoa)

Según el director comercial de la constructora JF, John Sánchez Barrios, el problema registrado entre mayo y junio por la suspensión del servicio se debió a las lluvias que obligaron al cierre continuo de la bocatoma, como ocurre con el Ibal al subir los niveles de turbiedad.

De acuerdo con Sánchez, el conjunto cuenta con dos tanques de reserva de 700 metros cúbicos y que abastecerían a los habitantes durante tres días continuos, pero ante el cierre de la bocatoma,  es imposible su llenado.

Por otra parte, el directivo hizo énfasis en que la Constructora contrató la construcción de una planta de tratamiento la cual funcionaría extrayendo agua cruda de un pozo de 80 metros de profundidad a través de una moto bomba, alternativa que ha sido rechazada por el consejo de Administración de Alminar Samoa. (Ver: Nadie presta el servicio de acueducto en Alminar Samoa”: Procurador Ambiental)

La empresa reconoce que la iniciativa no fue socializada y por esto se han generado comentarios negativos que impiden una solución.

Y por último, dejó claro que la empresa no quiso y no ha querido asaltar la buena fe de los compradores, pues el suministro de agua potable es responsabilidad del Municipio y del administrador del acueducto El Triunfo.

EL OLFATO: Si la empresa conocía que de los 32 acueductos comunitarios en la ciudad, solo uno garantizaba el suministro de agua potable ¿por qué desarrollaron  un proyecto de vivienda bajo estas condiciones?

John Sánchez Barrios: El tema de que el agua no sea potable no significa que la vivienda no sea digna como gran parte de los propietarios están manifestando, porque un cliente colocó una tutela y el juez manifestó que el apartamento del señor no es vivienda digna porque no tiene agua potable.

Por ejemplo en Chucuní, donde actualmente hay un crecimiento bastante bueno en el tema residencial y se construyen casas quinta de cinco y seis alcobas, casas con piscinas, con cancha de tenis, los pisos son en mármol y el agua proviene de un acueducto comunitario y no es potable porque no la puede consumir directamente, pero es un agua que si se le hace dos tratamientos sencillamente se puede consumir.Es un agua que se puede utilizar para consumo doméstico y no es potable. Si estamos diciendo que si Alminar samoa no es vivienda digna solo por el tema de agua potable, quisiera vivir en una casa de 320 M2 en Chucuní y que tampoco sería una vivienda digna. Este tema no se puede enmarcar exclusivamente en el tema del agua potable.

E.O.: JF Construcciones tiene alguna reclamación legal por vender estos apartamentos en estas condiciones...

J.S.B: No, hasta el momento. La tutela que puso el señor Leonel Hoyos fue contra la fiduciaria, del banco y la constructora JF y al final el juez, quien le dio la razón al señor, dijo 'que el responsable no es la constructora', la responsabilidad de llevar agua potable a un inmueble que es urbano es de la Alcaldía Municipal y del acueducto El Triunfo y seguramente la respuesta que se vaya a dar sería esta.

E.O.: En la mesa de diálogo que hizo la Contraloría General con los curadores y el Procurador Ambiental sobre Alminar Samoa se expuso que vender apartamentos en estas condiciones sería como estafar a los propietarios, ¿Qué opina al respecto?

J.S.B: El 70 % de los clientes que viven en Alminar Samoa compraron su apartamento en $90 millones. Hoy, en valorización valen $123 millones, ahí empezando no consideraría eso una estafa, porque un tema es que se tenga un inmueble y que al pasar tres o cuatro años te ganes $30 millones. Con respecto a los inconvenientes que tenga el conjunto Alminar Samoa, es otra cosa diferente y se pueden solucionar. La Alcaldía Municipal está siendo todo lo posible para solucionar este tema. No se puede considerar una estafa cuando se está ganando plata en una valorización del inmueble y manifestar que tener un problema sea una estafa.

E.O: Entonces sería un problema de percepción...

J.S.B: es un tema de percepción y puede ser que no sea tanto de eso porque el problema es real, pero lo mismo tendría que decir con respecto al Ibal, pues Ibagué está totalmente estafado entonces, porque no cuenta con el servicio todo el momento ni todo el tiempo. Además, si usted recibe el agua, se le puede hacer dos tratamientos. Donde yo vivo tengo el servicio del IBAL y no por ello, abro la llave y me voy a tomar un vaso de agua. Que hace uno, lo que le enseñaron las abuelitas: coja la ollita, hierva el agua, déjela 25 minutos y ya con ese proceso mata las bacterias. Ese proceso es normal y es el que todo el mundo hace en sus casas.

E.O.:Pero eso sería trasladarle la responsabilidad al comprador, al usuario...

J.S.B: Existen 31 acueductos comunitarios que no tienen planta de tratamiento y el 40% vive de esa manera, pero no quiere decir que eso se encuentre bien.

E.O.: Cuando se vendió el proyecto se le dijo a los usuarios que el servicio lo prestaba un acueducto comunitario y que el agua no era potable?

J.S.B: Una de las cosas es que cuando comercialmente se está vendiendo un proyecto, no se puede manifestar que el agua no es potable y que no se puede consumir, pero sí se les dijo que el agua que iban a recibir era del acueducto comunitario El Triunfo y esa potabilidad del agua corresponde es al acueducto.

E.O.: Omitir información como esa, ¿es asaltar en la buena fe a los compradores?

J.S.B: Yo no lo considero asaltar la buena fe porque el proyecto se está desarrollando de esa manera y además reciben otros beneficios totalmente diferentes a otros proyectos urbanísticos de la ciudad. Hay beneficios que el proyecto tiene que son mucho más atractivos, como el hecho que está a unos minutos del centro comercial La Estación. Las personas dicen que esto no es vivienda digna y creería que están supremamente equivocadas.

E.O.: ¿Qué decirles a los habitantes de Alminar Samoa?

J.S.B: Actualmente se encuentra una planta de tratamiento que el Ibal ya terminó, ahora lo que falta es ponerse de acuerdo y que esto pueda andar, está esa opción y la otra es con la empresa Sepudo. Hay dos alternativas y la decisión está en los mismos propietarios.

E.O.: De llegarse a aceptar el plan que ustedes como constructora viabilizaron ¿quién tomaría la administración de ese acueducto?

J.S.B: Sepudo es una empresa privada que está inscrita ante la Superservicios y sería esta empresa la que haría el cobro y la prestación del servicio; pero actualmente el acueducto El Triunfo no cuenta con la capacidad técnica y económica de cobrar, los habitantes Alminar Samoa no están pagando por el servicio de agua. Están recibiendo agua, pero no están pagando por este servicio y Sepudo como empresa privada requiere de un funcionamiento y unos costos y cuya tarifa sería muy similar a las del Ibal.

E.O.: El tema de los costos puede ser que impida que los habitantes acceder a esta opción...

J.S.B: posiblemente, porque en algunas veces en nuestras redes sociales hemos encontrado comentarios como que: te venden el apartamento sin agua para después venderte el agua.  Y yo digo, si yo te vendo este apartamento el Ibal o donde sea, te van a vender el agua.