Buses de transporte público siguen incumpliendo protocolos de bioseguridad
Usuarios del sistema de transporte público en Ibagué denunciaron que en 'horas pico' no se están cumpliendo los protocolos de bioseguridad en los vehículos.
Señalaron, principalmente, el sobrecupo en los buses, el uso inadecuado de tapabocas por parte de los pasajeros y el mal estado de los dispensadores de alcohol.
“Por el afán y por cumplir en el trabajo uno tiene que someterse a esa situación”, indicó uno de los usuarios.
La situación es particularmente riesgosa por el alto grado de ocupación de camas UCI en Ibagué, el cual se ha mantenido por encima del 95%.
“¿Qué pasaría si un infectado sube a un bus con esas personas amontonadas?”, manifestó otro ciudadano.
Al respecto, el Ministerio de Salud determinó, mediante la resolución 2475 de 2020, que la ocupación máxima de los buses de transporte público es de un 70%, según su aforo. Esta norma solo rige para ciudades que se encuentren por encima del 85% en ocupación de camas UCI, dentro de las que Ibagué está incluida.
Aunque la medida ya aplicaba en la capital tolimense, solo hasta hoy el alcalde Andrés Hurtado ratificó la norma del 70% como parte de una serie de restricciones para prevenir la propagación del COVID-19 en la ciudad. (Ver: Hurtado expide medidas para prevenir el COVID-19, pero sin toque de queda y 'pico y cédula' voluntario)
El secretario de movilidad Municipal, César Yañez, por su parte sostuvo: “hemos realizado operativos para garantizar esos protocolos, informamos a los propietarios y empresas al respecto. Intensificaremos controles la próxima semana debido a la ocupación UCI actual en Ibagué”.
La Personería Municipal ya había realizado inspecciones meses atrás, en las que concluyó que algunos buses no estaban siguiendo los protocolos de bioseguridad, como el aseo frecuente a los vehículos y el número de pasajeros ingresados. (Ver: Personería advierte que busetas de transporte público no están cumpliendo los protocolos de bioseguridad)
Sin embargo, estos esfuerzos de las autoridades municipales están siendo en vano, pues ni conductores ni pasajeros están acatando las restricciones.