De manera temprana el exalcalde de Ibagué Andrés Fabián Hurtado Barrera arrancó la campaña a la gobernación del Tolima para el periodo 2028 – 2031. Mientras Hurtado recorre los municipios del Tolima sumando aliados con el propósito de fortalecer su precandidatura, en Ibagué se construye un castillo de naipes burocrático que intentará mantener durante los próximos tres años, para llegar sólido con su equipo político a las elecciones territoriales.
La estrategia es la siguiente: Buscar a los excandidatos a alcaldías de diferentes municipios que quedaron segundos y/o terceros en las pasadas elecciones, reunir a su vez exalcaldes y líderes decepcionados o alejados del Barretismo, posteriormente reunirse con ellos, sus equipos de trabajo y tomarse la foto para demostrar crecimiento a través de sus redes sociales. El acuerdo se sella cuando a nombre propio o de un tercero, ingresan al gobierno “Ibagué para todos”, -razón tiene el eslogan- y asumen públicamente su alianza manifestando el apoyo en redes sociales al “Hurtadismo”, evidenciando de esta manera la cooptación.
Algunos de estos excandidatos o exalcaldes, que actualmente hacen parte de la Administración Municipal de Ibagué son: Jorge Armando Cabrera, exalcalde de Venadillo, como subgerente de servicios de salud de la USI y recientemente encargado de la gerencia de la USI de Ibagué; Aquileo Medina ex congresista y ex candidato a la Alcaldía de Espinal, como gerente del Sistema Estratégico de Transporte Público (SETP); Iván Alfredo Quesada, exalcalde de Lérida, recientemente nombrado Secretario de Desarrollo Social, este sí, un aliado de más antigüedad. En Ibagué Limpia están Stiven Báez, excandidato a la alcaldía de Cajamarca, como jefe de comunicaciones; y Rodolfo López Sierra, exalcalde de Santa Isabel, como director jurídico. Así mismo, están como contratistas de la Alcaldía de Ibagué, Jorge Iván Vásquez, exalcalde de San Antonio, contratado en el IMDRI; y Ernesto Cuero, exalcalde de Coello, contratado en la Secretaría de Movilidad, entre otros.
Esta burocracia se debe mantener vigente y robusta para sacar avante los proyectos políticos de Hurtado: la candidatura a la Cámara de Representantes de su hermana, Carolina Hurtado Barrera, quien hasta hace unos días fungía como la Secretaria de Desarrollo Social de Ibagué, y la suya propia a la Gobernación del Tolima. Aquí no hay ideología ni amor por alguna causa, tan sólo el rescate amañado de quienes buscan no quedar huérfanos de poder.
Mientras tanto la Alcaldesa de Ibagué tendrá que seguir haciendo maniobras para gobernar, y a su vez, sostener las cuotas políticas de Hurtado. Lo cual genera un traumatismo administrativo por los cambios constantes en el gabinete al antojo de su jefe político. Se pierde la continuidad en los procesos y en época electoral, estas fichas tendrán que concentrarse en sacar la mayor cantidad de votos en sus respectivos municipios.
De todo esto surge un interrogante, ¿Cuál será el costo que debemos pagar los ibaguereños para sostener la apuesta política del Hurtadismo? Un equipo que sin duda alguna gobierna pensando en las próximas elecciones y no en las próximas generaciones.