Una ‘Dulce’ historia de amor: la perrita que venció a la muerte
Algunas veces nos preguntamos si es más importante saber o amar. Para unos es una opción en concreto, y para otros es quizá una unión de ambos conceptos: saber amar.
Desde niños empezamos una búsqueda incansable de nuestro ángel de la guarda, pero en la historia de ‘Dulce’ -sin esperarlo- existen dos.
Quizá se estarán preguntando de quién hablo, pues déjenme hacerles una breve introducción: se trata de una perrita mestiza, de aproximados 9 meses, la cual sufrió un accidente que le impedía caminar, hasta que conoció la bondad.
“Ella estaba más o menos unas dos semanas en la Veterinaria de Urgencias del Tolima y una amiga la vio y preguntó que qué le había pasado y le comentaron que ella vivía en un parqueadero, donde allí fue atropellada”, contó Carolina Quintero, una de las tutoras de ‘Dulce’.
Sin embargo, como lamentablemente sucede en muchas ocasiones, la perrita fue abandonada por sus cuidadores, pero eso no fue un problema, pues en la clínica encontró dos familias.
“Mi amiga me comentó sobre ‘Dulce’ y empezamos a hacer la estrategia para recoger la plata entre varios. Alcanzamos a recoger muy buenos recursos”, dijo.
Una vez con el dinero recolectado, pusieron en marcha su plan: hacer que la perrita volviera a caminar. Y, con ese propósito en mente, la llevaron hasta otra veterinaria.
“La tutora nos trajo a Dulce a consulta neurológica, cuyo diagnóstico fue: parálisis en tren posterior de miembros pelvianos, es decir, en sus paticas traseras; tenía alteraciones motoras propias de una lesión espinal, es decir, una lesión a nivel de la columna vertebral y, evidentemente, en la radiografía se evidenció una luxofractura de la columna, una lesión bastante grave”, explicó uno de los veterinarios de Neurofisiovet.
Su pronóstico era reservado y, como si se tratase de un reloj de arena, su tiempo de vida se agotaba cada vez más.
“Lamentablemente, ella tenía un diagnóstico reservado, pero le comentamos a la tutora que podíamos realizar una intervención quirúrgica para estabilizar la columna y tratar de revertir el cuadro que la paciente estaba presentando, buscando que recuperara su capacidad sensitiva y motora”, precisó.
Y para quienes no creen en los milagros, estén atentos al siguiente:
“Se realizó el procedimiento quirúrgico: una estabilización de la columna, se colocaron unos implantes y se comenzó un proceso de terapia y rehabilitación física. Por fortuna, todo salió bien, la paciente respondió muy bien a la cirugía”, indicó el profesional de Neurofisiovet.
Ocho días le bastó al animal para dar una ‘dulce’ sorpresa: volvió a pararse para caminar.
“La operaron el 9 de noviembre y a los 8 días empezó a pararse”, puntualizó Carolina.
Y agregó el experto: “ella no podía caminar, se arrastraba, pero ya, en este momento, hay una maravillosa respuesta”.
Cada terapia es un paso más hacia un nuevo hogar para ‘Dulce’, ya que, luego de finalizarlas, será dada en adopción.
Algunas veces nos preguntamos si es más importante saber o amar. Para unos es una opción en concreto, y para esta historia es, sin duda alguna: saber amar.