La historia del hondano que se abrió paso en España cantando bajo la nieve
Mi papá siempre me pedía que lo acompañara a sus eventos a escucharlo cantar y a mí me daba una ‘hartera’ (pereza), pero él siempre me decía: usted algún día me lo va a agradecer.
Con esas palabras incrustadas en su vida empezó su carrera como artista Mike Hamir, un cantante colombiano que ha logrado ganarse el más profundo respeto y la más grande admiración del público mundial.
Su historia
Nació en Honda hace 33 años en el seno de una familia de artistas, teniendo como principales referentes musicales a su abuelo y a su papá.
“La música ha sido mi acompañante durante toda la vida. Mi papá y mi abuelo son músicos también. Ellos tuvieron sus grupos y orquestas y siempre tuve la música muy cerca de mi vida”, contó.
Su mamá también fue parte de este proceso de formación artística, ya que lo motivaba a cantar en eventos del colegio como el día de la madre y del padre.
“Desde que era pequeño mi mamá siempre me impulsaba a presentarme en los programas en el colegio para que cantara en los días especiales. Entonces siempre tuve la música muy cerca”, dijo.
A partir de entonces, comenzó a sentir la música como algo más que un trabajo, ya que su vida giraba alrededor de las notas musicales y las melodías en la orquesta de su familia llamada ‘Padres e hijos’.
“Estuve 17 años de mi vida dedicándome a la música en Colombia gracias a Dios y a una oportunidad grandísima que se dio con la Voz Colombia en su primera temporada, en la que estuve en el equipo de Andrés Cepeda y de ahí se abrieron muchísimas puertas”, expresó con orgullo.
Aunque su vida dio un giro de 180 grados al mudarse hacia la capital del país a los 19 años, la música siempre fue su más grande guía.
“Empecé a trabajar y a crearme como empresa. Llevaba casi nueve años trabajando en Bogotá, Medellín, Ibagué, entre otras ciudades, dedicándome de lleno a la música, no como artista, sino como empresario”, manifestó.
Sin embargo, Hamir nunca se imaginó que su voz y la pandemia lo llevarían a conquistar tierras europeas.
“Llevaba mucho tiempo trabajando en Colombia dedicándome a la música y mi sueño siempre fue conocer Europa. Y, el año pasado, justo para el 25 de febrero se dio la oportunidad de viajar”, afirmó.
Lo que inició como un viaje de ‘mochilero’ por países como: Francia, Bélgica, Luxemburgo, Suiza, Italia y España, se transformó en su nuevo camino para vivir.
“Cuando empezó la pandemia yo estaba en Bélgica y tuve que llamar a un familiar para que me diera posada aquí en Madrid. Y en ese momento, cerraron las fronteras entonces no podía devolverme”, puntualizó.
“Mi empresa paró por la misma razón y fue cuando tomé la decisión de vender todas mis cosas y renunciar a mi vida en Colombia. Fue una decisión bastante complicada y de mucho tiempo de pensarlo muy bien”, agregó.
De Colombia a España: un cambio de vida y de género musical
Fue así como con fuerza de voluntad, capacidad de adaptación y su mágica voz el joven cantante comenzó a abrirse camino ante los madrileños.
“Decidí hacer una nueva vida aquí en España, y ¿qué era lo mejor que sabía hacer? Pues cantar. Entonces me armé de valor y me quité de mucha vergüenza, porque pasar de tener una empresa y una vida en Colombia a estar cantando en las calles de Madrid, es algo bastante complicado, pero es un reto grandísimo que me propuse”, narró con gratitud.
Con el dinero de sus ahorros compró un amplificador y un micrófono para ganarse la vida como en algún momento lo hizo junto a su familia: honradamente.
El metro de Madrid era su tarima y los ocupantes sus espectadores durante aproximadamente tres meses, mientras obtuvo un permiso para cantar en el centro de la ciudad.
“Al principio fue bastante difícil. Tuve que acoplarme muchísimo porque el repertorio colombiano y la música que se escucha en Latinoamérica es un poco distinta a la que se escucha aquí. Afortunadamente, hablo y canto en inglés y por ahí me metí”, indicó.
Tanto así que uno de los momentos más memorables de su vida lo vivió mientras cantaba una canción bajo la nieve, pero lo que se restó en grados centígrados lo sumó a su talento.
“Un día estaba cantando en el centro de Madrid mientras estaba nevando y dio la casualidad que había personas entrevistando para programa que se llama ‘Ya es mediodía’ de Telecinco, y preciso me agarraron ahí cantando y fue un momento muy bonito porque salir en televisión en España sin imaginármelo, es grandioso”, dijo alegre.
Cantar mientras las fuerzas se congelan es algo que muy pocos valientes se atreven a hacer. Sin embargo, Mike lo vivió como una experiencia única dentro de las muchas que estarían por llegar.
“Tuve la fortuna también de que Pablo Alborán me subiera en sus historias mientras yo estaba cantando en el centro de la ciudad, eso también fue una experiencia muy bonita. Fueron 24 horas de mi vida en las que el celular no dejó de sonarme”, contó.
“Recibí tantas palabras muy lindas de aliento. Que Pablo Alborán te ponga en sus historias cantando una canción de él, te aplauda y te escriba que son de las mejores cosas que ha escuchado en el centro de Madrid no tiene nombre. Y ese fue el mejor pago que pude recibir”, concluyó.
Infinidades de cosas buenas, como su encuentro inesperado con el futbolista español 'Vitolo Machín' mientras cantaba en las calles, han llenado la vida del artista de motivación y enseñanzas. Y lo que algún día fue una ‘hartera’, hoy se convierte en parte de su historia, esa que se está escribiendo de camino al éxito.