El artista ibaguereño que regresó a su ciudad para llenarla de sabor y color

Esta historia empieza en el aeropuerto de Miami, Estados Unidos. Un mural que refleja la cultura cafetera, con una chapolera, un recolector, las imponentes montañas colombianas y el rojo intenso de los granos maduros cautivó a un miembro del equipo de EL OLFATO, quien – después de preguntar de más, como es costumbre- descubrió que había sido pintado por un colombiano, un ibaguereño.

Se trata de Camilo Perdomo; él es el protagonista de estas letras. Camilo es un artista y arquitecto  ibaguereño de 32 años que descubrió su gran talento desde que tenía apenas ocho años. Esa destreza con sus manos lo ha llevado a dejar su sello personal pintado en varios lugares del mundo y este 2025 lo tiene listo para conquistar suelo pijao y ser profeta en su tierra.

 

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Su mural más consentido es precisamente el de Miami y no por estar en tierras estadounidenses, sino porque es el que acompaña las tardes de café en la tienda Juan Valdez y el que le abrió las puertas con esta marca, gracias a la que ahora acompaña a los comensales en las tardes de charla y café en varias ciudades del país y del mundo. Con sus trazos plasma su personalidad artística, caracterizada por colores vivos que encarnan el estilo botánico y figurativo.

“Mi trabajo con Juan Valdez empezó hace dos años a través de una convocatoria para ser artista a nivel local y se fue expandiendo. Les gustó mucho mi estilo, les atrajo lo que pintaba y la técnica que se combinaba muy bien con su tendencia de ser la casa del café colombiano, cuidado, orgánico y natural”, dijo.

Además, trabajar con la marca más reconocida de café colombiano le abrió puertas que ahora están dispuestas para que otros artistas locales las crucen. “Fue una oportunidad para también mostrar un poquito a Ibagué, que tenemos muchos talentos y poder demostrar que los artistas locales podemos ir a desarrollar nuestro arte a cualquier parte del mundo”, expresó.

De la mano de Juan Valdez, Perdomo tiene su arte sobre murales en varios lugares de Colombia, Estados Unidos y algunos países de Europa. En todos refleja ‘la esencia de su tierra’, la naturaleza y los paisajes que lo enamoran.

Luego de los logros por fuera de su tierra, el hijo artista volvió a casa. A finales de 2024 decidió regresar a Ibagué para también ponerle su toque y crear un espacio donde la culinaria y el arte se mezclan para ofrecerle a propios y visitantes una experiencia diferente.

Curador, arte y cocina, así se llama este nuevo restaurante ubicado en el barrio La Macarena de la capital. Es un espacio para disfrutar de la comida fusión que se degusta dentro de una galería de arte, donde no hay que tener miedo de enamorarse de una obra.

“En Curador pueden encontrar muchos espacios ambientados con mi arte, con mis murales y mis cuadros. Hay cerámicas, artesanías y esculturas; aquí todo se vende, la obra que deseen la pueden llevarla a su casa con certificado de arte”, apuntó el artista.

Y en este espacio no solo se observar el arte, también se saborea. La oferta de postres, cocteles y platos tiene un alto contenido de productos locales que le dan su toque a cada preparación.

“Sin duda es un lugar para explorar y desarrollar lo que es el arte; habrá talleres de diferentes técnicas, de pintura, workshop de chaquetas para que puedan venir a personalizar sus prendas; pero también un espacio donde pueden desayunar, almorzar o cenar rico, tomarse un buen coctel con sus amigos o hacer un brunch. Es una propuesta especial y diferente que les invito a conocer”, expresó el arquitecto ibaguereño.

Un espacio para el arte local

Además de ser una nueva apuesta de emprendimiento en la ciudad, Curador tiene un propósito artístico. Camilo Perdomo quiere que sea un espacio creativo para los artistas emergentes o quienes quieren explorar sus talentos.

Por eso, este restaurante y galería de arte tendrá espacios creativos para los locales. “La gente puede venir acá a pintar a pintar sus cuadros y sus cerámicas; pueden venir a hacer arte junto a mí, les puedo les dar esa guía para encontrar y desarrollar ese artista interior que todos tenemos”, agregó.

Curador es un espacio totalmente nuevo y dispuesto para que quienes quieren ser artistas, lo exploren; quienes disfrutan del arte, lo aprecien y se lo lleven a casa y para que los amantes de la buena comida, tengan un lugar clásico e instagrameable para darse un gusto cargado de color y sabor.