Diputado cuestiona millonario convenio por $12.000 millones en la Gobernación del Tolima
La Gobernación del Tolima suscribió un polémico convenio con la Universidad de Ibagué por $12.059.153.802 para promover el pensamiento crítico y creativo en los niños, niñas y jóvenes de 11 municipios del Departamento a través de la implementación de la Ciencia, Tegnología e Innovación.
La millonaria inversión es casi equivalente a la destinada por la Gobernación para la construcción del megacolegio en el corregimiento de Bilbao, municipio de Planadas, al sur del Tolima y que beneficiará a 480 menores del sector rural. La inversión de la obra es de $13.000 millones, contrato que fue adjudicado el pasado 2 de abril.
No obstante, el convenio suscrito establece como una de las metas del proyecto la elaboración una red que interconecte a 176 instituciones educativas en los municipios de Armero - Guayabal, Chaparral, Espinal, Flandes, Lérida, Líbano, Melgar, Ortega, Planadas, Rovira y Saldaña.
De igual manera, la dotación y puesta en marcha de aulas polivalentes de creatividad y comunicación en cada una de las sedes educativas priorizadas.
No obstante, para el diputado liberal Carlos Reyes, la cuantía del convenio, además de exhobritante, es "injusta", máxime cuando para él hay necesidades en el sector en materia de infraestructura y a nivel universitario.
"Este es un Gobierno que sigue demostrando que sólo ayuda sus amigos, es un gobierno que no es equitativo. Mientras que a la Universidad del Tolima, que necesita plata y que atiende a los pobres del Tolima, le incrementa $1.500 millones en el presupuesto; al Conservatorio le da $2.000 millones, a la Universidad de Ibagué le da $12.000 millones para desarrollar un proyecto de desarrollo crítico, ¿usted cree que eso es equidad", cuestionó el asambleísta.
El convenio suscrito busca beneficiar a 7.636 estudiantes y otra de las estrategias es que puedan "a través de videos, mini-cuentos, historietas, canciones, dramatizaciones comunicar y apropiar el desarrollo científico y los saberes y experiencias populares".
Sin embargo, para Reyes, "en la educación pública básica y media se necesita inversión en salones que se están cayendo, hay escuelas sin unidades sanitarias, hay mucho niño sin transporte escolar y sin desayunos escolares. Usted cree que es equidad y justicia ayudarle a un amigo, porque todos sabemos que los de la Universidad de Ibagué son amigos del Gobernador y lo que está demostrando es que no gasta la plata del Departamento sino en sus amigos", polemizó.
De igual manera cuestionó la "ayuda a los privados que tienen como fundamento el lucro y la rentabilidad y está olvidando la educación pública".
Vale recordar que el gobernador Óscar Barreto, durante su primera administración (2008 - 2011) suscribió un convenio con la Universidad de Ibagué para la profesionalización de periodistas de la región.
Con ánimo de controversia
La secretaria de Planeación y de las Tic's del Tolima, Olga Lucía Alfonso Lanini, quien fue quien suscribió el convenio, en respuesta al diputado Reyes hizo claridad en que el proyecto se financia con recursos de regalías provenientes del Fondo de Ciencia y Tecnología y que debe ser aprobado por el Ocad.
La funcionaria expuso que, aunque desconocía las razones por las cuales el diputado hizo dichas afirmaciones, resaltó que "a veces se utilizan esas desinformaciones sin el suficiente sustento para generar controversias".
Alfonso defendió la firma del convenio con la Universidad de Ibagué, según ella por tener la "mayor experticia en la realización de este tipo de proyectos" y al contar con más de 11 años de estudios realizados y enfocados a la apropiación social.
Aunque cabe destacar que la Universidad del Tolima también hará parte en la ejecución del convenio. El aporte de ambas universidades es por la suma de $763. 320.925 representados en servicios.
Por último Reyes, puso en entredicho el plazo de ejecución del convenio (26 meses) debido a que se estaría comprometiendo vigencias futuras sin autorización de la Asamablea, aunque Lanini le recordó que estás son aprobadas por los Ocad y no por los diputados.