Descubren que hubo cambios irregulares en los diseños de los escenarios del Parque Deportivo
Solo con el paso de los días se siguen conociendo más irregularidades relacionadas con la defraudación de los pasados Juegos Nacionales. Esta vez, la Personería Municipal decidió abrir indagación preliminar en contra del Imdri por haber autorizado con posterioridad que la Unión Temporal Parque Deportivo 2015 modificara la estructura en concreto por una metálica en seis escenarios deportivos.
La investigación de la Personería se originó debido a un informe técnico presentado por el arquitecto Edwin Andrés Niño, en el cual se advertía que el consorcio colombo-español había decidido modificar la estructura en concreto por una metálica sin que el Imdri hubiera aprobado dichos cambios en la ejecución del contrato de obra pública número 119 de 2015. (Ver: Orlando Arciniegas no tenía contrato con el Imdri cuando montó licitaciones de Juegos Nacionales)
"La intención del cambio de la estructura de concreto a metálica nació por parte del contratista de la Unión Temporal Parque Deportivo 2015. Los diseños de Typsa decían que los escenarios debían llevar una estructura en concreto, y el contratista hizo la propuesta para que fuera metálica aduciendo que era más rápida la obra, más limpia, y que podía llegar fácilmente a los Juegos Nacionales. Ellos empezaron a trabajar sobre la estructura metálica antes de la aprobación del Imdri", aseguró el arquitecto Niño.
La excusa del consorcio era terminar los escenarios
De acuerdo con el profesional, el argumento del consorcio colombo-español fue que si se hacía la modificación de la estructura de concreto por una metálica los escenarios deportivos podrían estar listos para albergar las correspondientes disciplinas deportivas. (Ver: Consorcio colombo-español finalmente abandonó las obras del Parque Deportivo)
Así pues, el contratista decidió acudir a la cuestionada Curaduría Urbana número 2 para que se hiciera la modificación de la licencia de construcción, todo ello antes de que el Imdri diera su aprobación. (Ver: Zar Anticorrupción le pone la lupa a la Curaduría que aprobó licencias de los Juegos Nacionales)
"A raíz de eso, cuando hubo la aprobación, el Imdri aprobó un presupuesto adicional y eso se pagó en tres actas. Cuando yo las revisé, me di cuenta que habían unas cantidades pagas de la estructura, pero no había ningún elemento instalado en la pista de BMX. En otros escenarios sí habían estructuras elaboradas, pero se decidió cambiar de concreto a metálica: es decir, patinódromo, complejo acuático, Coliseo Mayor, pista de atletismo y complejo de tenis", afirmó Niño.
Y es que el proyecto del Parque Deportivo, por $73.539'221,032, era el más ambicioso de los pasados Juegos Nacionales, puesto que allí se construirían los seis escenarios que el contratista pretendió modificar estructuralmente: un complejo de tenis ($4.626 millones), la pista de BMX ($5.121 millones), el estadio de atletismo ($11.661 millones), el patinódromo ($8.667 millones), un Coliseo Mayor ($23.846 millones) y el complejo acuático ($10.410 millones).
No todos los escenarios albergarían juegos
Sin embargo, de acuerdo con el informe técnico, lo que más llama la atención es que la Unión Temporal Parque Deportivo 2015 haya querido 'acelerar' la construcción del Coliseo Mayor y el complejo acuático, sobre todo porque, desde el inicio de las obras el 23 de abril del 2015, ya se sabía que estos no alcanzarían a estar listos para los Juegos Nacionales. (Ver: Esto dijo el Fiscal (e) cuando visitó el Parque Deportivo)
"Hay dos escenarios que no eran para Juegos Nacionales, que eran el Coliseo Mayor y el Complejo Acuático, los dos más grandes del Parque Deportivo, y se sabía desde el inicio que no iban a llegar y por eso no se programaron disciplinas ahí. Aun así cambiaron la estructura a metálica: si el argumento era que lo hacían para que estuvieran listos para los Juegos Nacionales, pues para qué cambiar esos dos", dijo Niño.
Por lo demás, ahora será la Personería Municipal la entidad encargada de indagar acerca de la ocurrencia de estas irregularidades y, en ese mismo orden, verificar la existencia de la conducta y el autor o autores de las mismas.