Busetas y taxis, los responsables de la contaminación auditiva en Ibagué

La medida del Día sin carro y sin moto busca reducir la contaminación en Ibagué, pero parece que no es suficiente.

Las mediciones que hizo Cortolima en las principales vías de la ciudad mostraron que la contaminación auditiva se mantuvo casi igual durante este miércoles, cuando dejaron de circular durante 14 horas, todos los automóviles y las motocicletas.

Mientras en un día normal se registra en promedio entre 79 y 80 decibeles (db) en zonas como la calle 15 con carrera Tercera, este miércoles, durante el Día sin carro y sin moto, los sensores reportaron 74 decibeles.

“Esta es una reducción muy leve, lo que demuestra que aún hace falta mucho por hacer ambientalmente en el sector del transporte público”, dijo Diana Guerrero, ingeniera de la subdirección de Calidad Ambiental de Cortolima.

Lo más preocupante es que en las zonas comerciales de Ibagué se permite, como máximo, 70 decibeles en el día y 60 en la noche, lo que claramente no se cumple, principalmente por la contaminación que producen las cerca de 1.000 busetas y los 3.000 taxis que circulan por la ciudad.

Estrés y dolores de cabeza, las principales consecuencias

Seguramente usted ha observado cómo conduce la mayoría de conductores de transporte público en Ibagué. Pitan por todo. Lo hacen cuando el semáforo está en naranja, cuando otro vehículo se atraviesa, cuando un peatón pasa, para saludar a un amigo y hasta para manifestar su atracción por una mujer.

Todo ese ruido que producen las busetas y los taxis producen que se dispare el estrés, el dolor de cabeza y la migraña entre quienes viven o trabajan en zonas de alto flujo vehicular.

“La contaminación auditiva tiene enormes riesgos individuales y sociales, porque afecta a la salud persona e impacta también sus relaciones interpersonales y hasta su producción laboral”, sostuvo la ingeniera Guerrero.

El ruido en otras zonas

Cortolima informó que la calle 37 con carrera Quinta se registró como máximo 73.2 decibeles en la tarde, mientras que en la concurrida calle 10 con carrera Cuarta alcanzó los 72.1 (db).

Un comportamiento similar se reportó en la avenida Guabinal con calle 60 donde al caer el día los sensores reportaron 72.5 decibeles.