Sombras de corrupción y lazos familiares en la Superintendencia del Subsidio Familiar
La superintendente del Subsidio Familiar, Griselda Janeth Restrepo, está en el ojo del huracán. La dirigente política vallecaucana, que vigila a las 43 cajas de compensación del país desde hace 16 meses, protagoniza un bochornoso escándalo por presuntos hechos de corrupción ocurridos al interior de esa entidad.
Restrepo es acusada de obstruir investigaciones y de abuso de autoridad para proteger a los directores de Comfasucre y Comfamiliar Cartagena, precisamente dos de las cinco cajas de compensación intervenidas por la Superintendencia, y sobre las cuales hay más cuestionamientos por la manera como contratan importantes sumas de dinero, al parecer sin ningún mecanismo de selección objetiva y transparente.
Estos hechos ya han sido puestos en conocimiento de la Procuraduría General de la Nación, la Contraloría General de la República y la Secretaría de Transparencia de la Presidencia de la República, y las tres entidades han reclamado mayor vigilancia de la Supersibsidio, pero los resultados -coincidencia o no- han sido escasos.
Pero hay otro hecho que llama poderosamente la atención y que genera muchas suspicacias. La superintendente Griselda Janeth Restrepo maneja estas dos cajas de compensación a través de Rubén Darío Córdoba Victoria, quien es el jefe de la dirección financiera y contable de la Supersubsidio, y al mismo tiempo se desempeña como Agente Interventor Especial de Comfasucre y Comfamiliar Cartagena.
Córdoba Victoria, además, es reconocido en el sistema de compensación familiar como un “un hombre fuerte, tosco y amedrentador”, gracias a que goza del más absoluto respaldo de su jefa y casi pariente.
Sí. La cercanía entre Restrepo y Victoria va más allá de lo profesional y laboral. ELOLFATO.COM pudo establecer que el Agente Interventor de Comfasucre y Comfamiliar Cartagena está casado con una prima de la Superintendente.
La punta del iceberg
Detrás de las graves acusaciones está la abogada Jeannette Benítez de Arévalo, quien fue hasta hace un mes Superintendente delegada para la responsabilidad Administrativa y Medidas Especiales de la Supersubsidio, pero fue declarada insubsistente por atreverse -dice ella- a “tocar los intereses de la superintendente Griselda Janeth Restrepo”.
La exfuncionaria Benítez, en su informe de gestión de 60 páginas, radicado en la entidad el pasado 2 de febrero, no solo relató detalladamente cómo entregó el cargo sino que aprovechó para revelar hechos oscuros que habrían ocurrido en la Superintendencia durante en el último año, muchos de los cuales están soportados en memorandos internos y hasta correos electrónicos enviados desde el despacho de Restrepo.
“Me sacaron por meterme con Comfasucre”
La exsuperintendente Jeannette Benítez decidió adelantar una visita especial a la caja de compensación familiar Comfasucre, los días 26, 27 y 28 de agosto de 2015, ante un requerimiento que hizo la Procuradora Delegada para la Vigilancia Preventiva de la Función Pública, Anny María González Velasco, por las 11 denuncias que recibió en contra de esta caja, desde mayo del año pasado.
Pues Benítez viajó a Sincelejo con su equipo de la Superintendencia Delegada y encontró que la directora administrativa de Comfasucre, Erika Ahumada, estaba ejecutando $59.128 millones de pesos, correspondiente al presupuesto del año 2015 de la EPS del régimen subsidiado, sin que existiera un manual de contratación.
La exfuncionaria regresó a Bogotá y elaboró un duro informe en el que sostuvo: “Establecimos que en Comfasucre no existe manual de contratación que comprenda políticas y procedimientos claros y expresos para contratar servicios de salud, de acuerdo con lo señalado por la ley con el fin de que los procesos sean transparentes”.
“En los últimos dos años y hasta la fecha, (Comfasucre) persiste en la desatención de postulados de imperiosa observancia que a todas luces presuntamente está vulnerando los principios de transparencia y selección objetiva”.
“Precisan los servidores de Comfasucre que no conocen que en la Corporación se haya conformado alguna vez comités para evaluar ofertas. No obstante, lo que sí tienen claro es que el proceso de selección y adjudicación corresponde exclusivamente a la discrecionalidad en cabeza de la Directora, doctora Erika Janeth Ahumada”.
La exsuperintendente Benítez cuenta en su denuncia que este delicado hallazgo fue reportado a la Procuradora Delegada para la Vigilancia Preventiva de la Función Pública, Anny María González Velasco, y que desde ese mismo momento supo que no iría más en la entidad porque se convirtió automáticamente “en la piedra en el zapato para el manejo de sus intereses (los de al Superintendente) en las cajas de compensación”.
También le envió copia de su informe al secretario de Transparencia de la Presidencia de la República, Camilo Enciso, quien decidió requerir a la directora de Comfasucre, Erika Ahumada, para que le enviara el manual de contratación de la caja.
Ahumada respondió un derecho de petición de la Secretaría de Transparencia con abundante información sobre la contratación de la EPS del régimen subsidiado, pero no habría sido precisa en si tiene o no manual de contratación.
“Nosotros tenemos conocimiento de este tema desde el mes de octubre del año 2015. Hemos enviado derechos de petición solicitando información pero hasta este momento, repito, hasta este momento, no tenemos certeza de que Comfasucre tenga un manual de contratación”, advierte el zar anticorrupción.
La respuesta de Comfasucre está siendo estudiada por la Secretaría de Transparencia, pero preventivamente se dio traslado inmediato a los entes de control.
La Superintendente se defiende
La superintendente Griselda Janeth Restrepo se defiende de las acusaciones que hace su exfuncionaria, pero también admite que intervino de manera, al parecer, indebida en el proceso que se adelantaba en contra de Comfasucre y confirma su relación familiar con el Agente Interventor de esta caja, el señor Rubén Darío Córdoba Victoria.
Dice que nada de lo que asegura la exsuperintendente Jeannette Benítez es cierto, que ya interpuso acciones penales contra ella, y que su trayectoria pública ha sido honorable no solo en el Valle del Cauca, en donde ha ocupado varios cargos oficiales, sino también en el Congreso de la República.
Restrepo fue Representante y Senadora de la República, y en las elecciones parlamentarias de 2014 aspiró nuevamente a la Cámara pero los votos no le alcanzaron. Su apoyo a la reelección del presidente Juan Manuel Santos en el Valle le permitió llegar a la Superintendencia del Subsidio Familiar, el 24 de octubre de ese mismo año. (Ver: Acto de posesión)
Intervino y descalificó el informe de su subalterna
La Superintendente sostiene que el hallazgo de la entonces superintendente delegada Jeannette Benítez era falso porque Comfasucre “sí tiene manual de contratación” y que por esa razón convocó a una reunión en su despacho a la directora de la caja y a la investigadora para controvertir el informe oficial, saltándose así el debido proceso.
Ese encuentro tuvo lugar el día 15 de septiembre de 2015, a las 2:00 de la tarde, en la sala de juntas de la Supersubsidio, como costa en este correo electrónico enviado desde el despacho de Restrepo. La funcionaria Benítez fue obligada a asistir, pese a que advirtió la ilegalidad de este procedimiento. (Ver: Correo electrónico que convocaba a la reunión)
“Me cansé de demostrarle que esas reuniones no eran la instancia para que la Directora (de Comfasucre) presentara explicaciones y que el procedimiento legal adecuado debía surtirse en la Delegada para la Responsabilidad, donde la Doctora Erika Ahumada podría contar con todas las garantías para defenderse dentro de un debido proceso”, asegura.
Aclara que asistió a la reunión pero dejó constancia de su impedimento y permaneció en silencio, para no ser recusada más adelante.
Por esa razón siguió adelante con su proceso, abrió una investigación administrativa y formuló cargos en contra de la directora Erika Ahumada. “Y en enero, cuando la investigación iba en marcha, me declaró insubsistente”.
Griselda Restrepo insiste en que hizo bien al llamar a las dos funcionarias a su despacho para discutir el informe de la Delegada, pese a que ella sería la segunda instancia en la investigación administrativa que se veía venir.
Fuentes de la Supersubsidio, que pidieron mantener sus nombres bajo reserva, expresaron que no es normal que un Superintendente llame a un vigilado y le cuente qué encontraron los funcionarios en las visitas de inspección, y después los cite a una especie de ‘careo’ para desvirtuar los hallazgos detectados.
Sobre la salida de Jeannette Benítez, la funcionaria dice que se fue “porque se le cumplió su tiempo en la Superintendencia y esta Superintendente decidió que ella no debería estar, y por eso la declaré insubsistente”.
“Quedaron tranquilos con mi salida, ya pueden continuar manejando los $5.000 millones mensuales de Comfasucre a su antojo, con amplia discrecionalidad y sin control alguno”, responde Benítez.
Así respondió a la pregunta de si su funcionario ‘estrella’ era el esposo de su prima
A la superintendente Griselda Restrepo la tomó por sorpresa la pregunta sobre la relación familiar que tiene con Rubén Darío Córdoba, el Agente Interventor de Comfasucre y Comfamiliar Cartagena.
-¿Y el doctor Rubén Darío es de Palmira como usted?
¡Sí señor, es de Palmira como yo!
-¿Y está casado con una prima suya?-
¡Por qué sabe eso usted!
-Porque soy periodista-
-Ah, me alegra mucho… Sí, está casado con una prima mía-
-¿No le parece que no se ve bien?-
No porque yo no soy una persona absolutamente cercana, porque es una persona que yo conozco desde hace mucho tiempo… Le quiero contar que al doctor Córdoba yo no lo conocí por mi prima, lo conozco desde hace mucho tiempo, cuando íbamos a la Universidad Libre juntos, él estudiando finanzas (es Contador Público) y yo estudiando derecho. Es una persona en la que confío plenamente, yo creo que uno también tiene derecho a caminar con la gente en la que confía, en los sitios donde puede ir, y usted entenderá que hay temas de confianza también en los cuales uno necesita gente muy cercana.